Tras su debut victorioso ante el austriaco Jurgen Melzer en el día inaugural del torneo, Roger Federer volvió a saltar a pista en la jornada de miércoles para disputar su partido correspondiente a la segunda ronda del Open de Australia. Bajo un cielo azul con sol radiante, pero con una ligera brisa, compareció el suizo ante el público de la Rod Laver Arena.

El campeón de 17 Grand Slams tendría enfrente a otro tenista procedente de la fase previa, como es el joven americano de 20 años de edad, Noah Rubin, que en el día de hoy mostró tener grandes dotes, además de obligar a Federer a subir en muchos momentos el nivel de juego.

Federer toma el control en los dos primeros sets

El tenista americano venía ya con rodaje, pues acumulaba en sus piernas cuatro partidos: los tres de clasificación más el de primera ronda, donde superó a su compatriota, y también de su misma generación, Bjorn Fratangello, un jugador que puso en serios aprietos a Novak Djokovic en el pasado curso bajo el también sofocante calor del desierto de california en el primer Másters 1000 del año, Indian Wells.

El guión en el primer set se basó principalmente en el servicio de ambos jugadores, pues no se dieron concesiones el uno al otro. A Rubin no le pesó el hecho de tener enfrente al suizo, y pasito a pasito, servicio a servicio, fue encaminando el primer set al desempate. El suizo, por su parte, se mostró seguro al saque y a la espera de una oportunidad al resto que llegaría en los compases finales del primer parcial. Ahí, la experiencia y veteranía del helvético propiciaron un break que a la postre le daría a Federer el primer set.

Preciosa imagen de Federer impactando su revés. El suizo, a tercera ronda | Foto: Australian Open

En el segundo set, poco cambiaron las tornas, solo que con la diferencia de que Federer se encontró con el break nada más iniciarse el parcial. De nuevo, el suizo tiró de experiencia, siendo seguro en el servicio y expectante al resto. Rubin lo intentó, pero el Maestro de Basilea no quiso ningún tipo de problemas y se adueñó también del segundo parcial.

Rubin, apunto de arañar un set a Federer

Todo estaba yendo de cara para Federer, pero los momentos de incertidumbre y de irregularidad en sus golpes aparecieron por primera vez en el partido, como ya sucediera en el segundo set del encuentro ante Jurgen Melzer. Rubin aprovechó la oportunidad que le concedió Federer llegando hasta el momento de sacar para ganar el tercer parcial. Sin embargo, el joven americano notó la presión del momento y fue justo ahí cuando Federer fue el más listo.

Apretó los dientes y quebró el servicio de Rubin. Tras ello, la tercera manga desembocó en un tie break que a la postre se llevaría Federer. El resultado final fue de 7-5 6-3 y 7-6(3) y el suizo se enfrentará en la tercera ronda con el checo Tomas Berdych, en lo que será verdaderamente la primera piedra de toque para medir el nivel de Federer. Partidazo el que se avecina el próximo viernes.