Partiendo como el cabeza de serie número seis del primer Grand Slam de la temporada, el Open de Australia, el francés Gael Monfils acudía con ganas e ilusión a Melbourne, no habiendo jugado ningún torneo previo a la gran cita australiana, teniendo que batirse en la primera ronda del torneo con el checo Jiri Vesely, a quien conseguía derrotar después de una hora y media por 6-2, 6-3 y 6-2, clasificándose por tanto para la segunda ronda del torneo australiano, donde tenía que medirse con el ucraniano Alexandr Dolgopolov, número 69 del ránking ATP tras sucumbir en la primera ronda del Brisbane International y el Apia International Sidney, y que acudía a la cita contra el francés tras imponerse a Borna Coric por 6-3, 6-4, 3-6 y 7-6 (7). El duelo estaba servido en la pista Hisense Arena, habiendo más de cincuenta puestos de diferente en el ránking, algo que no impedía que las espadas estuvieran en todo lo alto para conseguir el triunfo.

Monfils empieza pisando fuerte

Cuatro serían los juegos de tanteo que tendrían Monfils y Dolgopolov durante los primeros compases del encuentro, midiendo fuerzas en la distancia para evitar dar un paso en falso que les condenara a claudicar con su servicio. No sería hasta el sexto juego cuando Gael terminaría de dar su estocada a la primera manga, y es que tras colocarse con 3-2 a favor, el galo subía su nivel al resto, quebrando el servicio de Alexandr para poner rumbo hacia el 4-2, donde consolidaba el quiebre obtenido anteriormente y tenía un cómodo 5-2 a favor. Dolgopolov alargaría el primer acto un juego más, pero con su servicio el tenista francés no encontraba problema alguno para llevarse el primer parcial por 6-3, tomando la delantera en el partido sin que su contrincante le generara problemas.

Tras un pequeño descanso en el que aclarar ideas, todo cambiaría sobre la Hisense Arena, y es que Dolgopolov no se daría por vencido tan fácilmente, logrando un quiebre a las primeras de cambio que le llevaba hasta ni más ni menos que un interesante 0-3. No sería más que un mero espejismo la reacción del tenista ucraniano, puesto que rápidamente Monfils volvía a entrar en ritmo de juego, dejando un lado la empanada inicial que sufría en esta segunda manga para no solo ser capaz de recuperar el quiebre perdido, sino también para obtener otra rotura más que le llevaba en volandas hacia el 5-3. Al resto no pudo hacerse con la segunda manga, pero como ya ocurriera en el primer acto, Gael no tenía problemas con su saque para llevarse el parcial por 6-4.

Dolgopolov se pase en la tercera manga, pero Monfils le hunde en el cuarto parcial

El aviso que dio Dolgopolov en la segunda manga terminó quedando anulada fácilmente por Monfils, pero ya en el tercer parcial el ucraniano conseguiría encadenar ni más ni menos que la friolera de cinco juegos, yéndose hasta el 0-5, con el que tras un juego de calma cerraba el tercer acto por 1-6. Gael tendría que reaccionar en el cuarto parcial, y vaya si lo haría, no dejando que Alexandr creara peligro al resto, logrando tres roturas que dejaban al francés un impoluto último set del partido que se llevaba por 6-0 para clasificarse para la tercera ronda del Open de Australia al imponerse por 6-3, 6-4, 1-6 y 6-0 después de una hora y cincuenta y seis minutos de partido. En la tercera ronda Gael Monfils tendrá que batirse en duelo con el alemán Philipp Kohlschreiber, quien previamente se ha deshecho del georgiano Nikoloz Basilashvili y el estadounidense Donald Young.