Del Potro  encontró en Dzumhur un jugador prolijo y sólido del fondo de la cancha que lo atacó constantemente sobre su revés. El comienzo del primer set  fue uno de los pocos momentos en que el bosnio estuvo errático y Del Potro encontró rápidamente el quiebre. Damir estuvo errático en la volea, lo que fue una constante durante todo el partido. Ambos mantuvieron su saque hasta el octavo juego en el que Dzumhur quebraba el saque del argentino atacando con pelotas profundas de devolución del segundo saque y definiendo con el drive. A todo este repertorio del bosnio se sumaron las dobles faltas de Del Potro.

El bosnio siguió presionando sobre el revés y Juan Martin continuó padeciendo el partido pero manteniendo su saque hasta llegar al tie break, que Del Potro lo gana con autoridad para quedarse con el primer set por 7-6 (5).

Dominio del bosnio en el segundo set

Aunque el argentino obtuvo el primer quiebre en el cuarto juego del segundo set nunca logró durante todo el set entrar en ritmo. Damir jugo su mejor tenis presionando desde el fondo de la cancha sobre el revés, solido con buenos porcentajes de primeros saques, manejando con tranquilidad su revés cruzado, combinando con paralelos, que hizo que Del Potro perdiera eficacia y agresividad logrando quebrarlo en dos oportunidades quedándose con el set por 6-4.

Del Potro encuentra en el tercer set su mejor nivel y se queda con el partido

Después de un segundo set plagado de errores de Del Potro, el argentino volvió a ser el jugador del 2016, todavía falto de ritmo, pero encontrando confianza con su primer saque y conectando su violento drive que hizo que Dzumhur se mantuviera por momentos a la defensiva. Ambos sostuvieron el saque hasta el sexto juego en el que Damir, dejó su juego sólido desde el fondo y cometió errores intentando drops y no siendo preciso con la volea, lo que permitió que el argentino quebrara el saque y mantuviera después el suyo para ganar el tercer set, sólidamente por 6-4.

Le espera en cuartos de final su verdugo del año pasado, Sam Querrey, otro duro escollo que deberá pasar para seguir buscando el ritmo que le llevó a escalar 600 puestos en el 2016.