El jugador español Feliciano López (nº 31 del ránking ATP) ha hablado sobre los tiempos médicos (medical time out en inglés) en los partidos de tenis. Esas pausas para recibir tratamiento que un jugador puede emplear en caso de sentir molestias físicas.

"Estoy en contra de los tiempos médicos porque se abusa de ellos. La norma deja muy abierto el tema porque un jugador, si es honesto, no va a parar un partido, pero otro puede hacerlo y al final son casi diez minutos", declaró el toledano.

Estas pausas son una desventaja para el otro jugador, ya que mientras espera que el oponente esté dispuesto a reanudar el partido, se puede enfriar y aumentar las posibilidades de sufrir también un percance físico, de ahí que en ocasiones se les pueda ver haciendo saques, estiramientos, mini-calentamientos y similares para no quedarse frío.

El tenis es distinto a la mayoría de los deportes, en los que si un jugador se lesiona o tiene algún problema, se va y lo reemplaza otro compañero; pero en el deporte de la raqueta si no puedes seguir jugando, pierdes el encuentro sin que nadie pueda remediarlo.

"Parar un partido por una lesión no debería de poder hacerse. Cuando uno tiene un problema se va y ponen a otro. En tenis se permite un poco la norma y esa forma de actuar, no digo de manera antideportiva, pero sí de jugar con la norma",  siguió comentando el campeón de Roland Garros en dobles en 2016.

Acerca de su temporada 2017, dijo estar recuperado de las molestias que sintió en el Open de Australia (donde cayó en primera ronda ante Fabio Fognini) y que tardaron en remitir: "Acaba de empezar el año, pero para mí no lo ha hecho de la mejor manera porque tuve el problema en Australia y he estado dos o tres semanas parado sin poder hacer nada. Desde Montpellier y Rotterdam he jugado sin dolor y ojalá pueda competir todo el año sin problemas y hacer una buena temporada. La salud en el tenis es lo más importante".

Feli compite esta semana en el ATP 500 de Acapulco, donde en primera ronda se las verá contra el nº 79 del mundo, el australiano Jordan Thompson.