David Ferrer atraviesa uno de los peores momentos de su carrera, esta vez no pudo con Diego Schwartzman y quedó eliminado del Masters 1000 de Miami. Desde la previa se podía prever que este partido iba a ser una prueba de resistencia, mas no de potencia. Los dos son jugadores contragolpeadores que encuentran su mejor juego corriendo de lado a lado por detrás de la línea de fondo. El argentino fue el que se plantó mejor en la pista y supo aprovechar las oportunidades que se le presentaron a lo largo del encuentro.

Ferrer empezó el partido sin encontrar su mejor tenis y Schwartzman aprovechó el momento para quebrar en el primer juego y confirmar su servicio en el siguiente. Cuando el partido se encontraba 3-2 para el bonaerense, Ferrer desaprovechó cuatro pelotas de break que hubieran sido determinantes para que el alicantino vuelva a la vida en el partido. A partir de ahí, el argentino ganó confianza y lo plasmó en el resultado ganando la primera manga con un cómodo 6-2.

El tenista español tampoco encontró en el segundo set su mejor nivel desde el fondo de la pista, y fue en el tercer juego cuando el escenario se le puso muy cuesta arriba al perder su servicio. Schwartzman se aferró a ese quiebre para seguir elevando su nivel y llegó a sacar una ventaja de cinco juegos a uno. Ferrer reaccionó, pero ya era demasiado tarde. Logró ganar dos juegos consecutivos, por primera vez en el partido, pero perdió su saque en el noveno juego del set y cayó eliminado del torneo.

Schwartzman, que ya había tenido una prueba maratónica en su primer partido frente a Khachanov, avanzó de esta manera a la tercera ronda en donde se enfrentará al ganador del duelo entre David Goffin y Darian King.