Es el hombre del momento, nadie puede dudarlo, y todo ello a sus 35 años. Y es que Roger Federer sigue maravillando y realizando un tenis que hasta resucitaría a los muertos. Todo ello le ha llevado a ganar el Open de Australia, consiguiendo así su tan ansiado decimoctavo Grand Slam y el pasado domingo el título en Indian Wells tras vencer a su compatriota Stan Wawrinka en la final del torneo.

Sin embargo, el pasado es pasado y el trofeo conseguido bajo el desierto californiano también lo es. Ahora, es momento de centrarse en lo más actual y lo más reciente, y eso son las pistas del Másters 1000 de Miami. Unas pistas que no se adaptan del todo al juego del Maestro de Basilea, pues la superficie es más lenta que en Indian Wells o Australia, pero aún así, aquí Federer sumó dos títulos.

Ya han pasado quince años desde que el helvético llegase a su primera final en Cayo Vizcaíno, y de un Másters 1000, momento en donde un tal Andrè Agassi le batiera en cuatro mangas. Hoy, Federer volvía tras tres años de ausencia en Miami, y lo hacía debutando ante el joven tenista americano Frances Tiafoe, un tenista que siente una gran devoción por el suizo. Todo son elogios. Sin embargo, esos elogios debían quedar a un lado si Tiafoe quería vencer a su ídolo, tarea más que complicada observando el nivel actual de Federer.

Federer tira de veteranía en un primer set muy igualado

Como si de un Deja Vu se tratase. Y es que la situación de hoy ante Tiafoe recordaba mucho a la vivida hace unos meses en Dubai cuando Federer cayó ante Donskoy. El ruso era un desconocido para el helvético y acabó sorprendiendo al campeón de 18 grandes. Sin embargo, Federer no estaba por la labor de repetir esa situación acontecida en el Emirato.

Frances Tiafoe, un NextGen con grandes dotes | Foto: zimbio

Pero no iba a ser tarea fácil, y es que Tiafoe presentó mucha batalla Federer que tuvo que ser él quién diera un paso al frente para poder vencer al joven americano. Tiafoe realizó un gran tenis, sin ningún "respeto" ante el rival que había en el otro lado de la red y apoyándose en la derecha, una de sus mejores armas, fue avanzando paso a paso hasta lograr forzar el tie break. La experiencia es un grado, o eso dicen, y de eso tiró Federer en la muerte súbita para llevarse el primer set.

El suizo se quita la tensión

Un buen peso de encima se quitó Federer, y es que ante un rival con el que nunca te has enfrentado, ganar el primer set es algo muy importante. Lo mismo hizo en Dubai, pero el resultado fue el que fue y aquí el suizo aprendió la lección. Tras haberse adjudicado la primera manga, Federer se desquitó esa tensión que podía tener durante el parcial inicial, aunque le costó un poco, y con ventaja a su favor y ya más relajado, el segundo set fue de más alto nivel.

Tiafoe quebró el servicio del suizo nada más iniciarse el set, pero Federer recuperó esa desventaja en el juego siguiente. A partir de ahí, ambos tenistas mostraron su grandes dotes en el saque hasta que fue el helvético quien se encontró con una nueva opción de rotura que no desaprovecharía.

Federer regresó a Miami tres años después con un triunfo | Foto: zimbio

Con lo más difícil hecho, era momento de mostrarse seguro y fiable en el saque. Pues dicho y hecho. Roger Federer batió a Frances Tiafoe en su debut en Miami en dos sets por el marcador de 7-6 (2) y 6-3 para seguir en su estado de dulce y acceder a la tercera ronda del certamen americano donde podría chocar con Juan Martín Del Potro, siempre y cuando el tandilense venza al holándes Robin Haase.