Pistoletazo de salida a la segunda ronda en el Masters 1000 de Roma que, junto con los últimos partidos de la primera, recibía a varios candidatos al título en el Foro Itálico. Zverev, Goffin, Cilic, Berdych, Murray o Djokovic acapararían los focos con sus respectivos cruces, y seguro no defraudarían al público allí congregado.

Novak Djokovic, número dos del mundo y finalista aquí el año pasado, comenzaba su andadura en tierras italianas ante un duro y no muy conocido rival, Aljaz Bedene, finalista en el ATP 250 de Budapest hace varias semanas. Djokovic, semifinalista en el Mutua Madrid Open concluido hace un par de días, no pasa por su mejor momento, y una buena actuación aquí le serviría para reivindicarse y llegar con buenas sensaciones a la gran cita de la tierra batida, Roland Garros. Bedene, por su parte, se encuentra cómodo en ese 55º lugar en el ranking ATP, y cuenta con la ligera ventaja de acumular tres partidos en Roma, ya que tuvo que superar la fase previa, donde venció a Lacko y Olivo, y su duelo de primera ronda, inconcluso tras el retiro del jugador local, Gianluca Mager.

Dos Grand Slam habían presenciado los dos únicos encuentros entre estos dos jugadores, con sendas y cómodas, victorias de Novak Djokovic. Su primer partido se dio en la segunda ronda del Open de Australia, dos años atrás, que acabó en 6-3 6-2 y 6-4 en un certamen que sería ganado por el jugador balcánico. Tiempo después, y en la edición de Roland Garros del año pasado, donde también ganó Djokovic, se impuso por 6-2 6-3 y 6-3, esta vez en tercera ronda.

Djokovic puede con un aguerrido Bedene

Lúcido y sorprendente inicio de partido por parte de Aljaz Bedene. El esloveno, aprovechando las imprecisiones de su rival, fue capaz de quebrar en el primer juego del encuentro, ante la expectación del público que no se esperaba esta reacción del qualy. Sin embargo, y como cabía esperar, Djokovic se metió de lleno en la contienda tras este varapalo y recuperó el break acto seguido, empatando a uno.

Bedene, jugando de tú a tú a todo un doce veces campeón de Grand Slam, trataba por todos los medios de no alargar los puntos con su saque, un saque muy efectivo y potente, que le hizo ganar ventaja gracias, también, a su poderosa derecha plana. Ese variado abanico de golpes que relucía hoy del lado del esloveno, le permitió disponer de una bola de rotura en el séptimo juego; pese a ello, Djokovic, con un gran servicio, salvó los muebles y puso el 4-3.

Con un Bedene valiente, atrevido, y un Djokovic algo más lento de lo normal, jugando muy bien con el revés pero fallando golpes más que asequibles, se llegaba al tie break para acabar con este interesante primer set. No hubo partido en el desempate, dominado de principio a fin por un Novak Djokovic que empleó su mejor servicio y estuvo muy atento con el resto. Con tres roturas en su favor, y solo una en contra, el serbio cerraría por 7-2 tras casi una hora de primera manga.

Novak Djokovic suda para ganar

Prometedor inicio de segundo asalto para un "Nole" Djokovic lleno de dudas, que no conseguía conectar con su "yo" interior pese a romper el servicio de Bedene en un primer juego que duró más de ocho minutos. Djokovic, que sufría para obtener golpes ganadores, hacía muecas y comentarios de desagrado, que bien podrían apartarle de su verdadero objetivo, la victoria. Con alguna que otra complicación, y tras perder una renta de 40-0, el de Belgrado certificó el break y puso el 2-0.

La capacidad ofensiva del treinta veces campeón de Masters 1000 fue en aumento y, en el quinto juego, consiguió batir, no sin trabajar, a un Bedene que peleaba todas las bolas y nunca se daba por vencido. Tras otro largo juego, en el que el nacionalizado británico salvó tres puntos de ruptura, Djokovic pudo poner el 4-1, lo que le confería una ventaja prácticamente definitiva.

Finalmente, y sacando para ganar el partido, Djokovic volvió a vivir un juego con suspense, largo, y en el que Bedene no aflojaba. El número 55 del mundo fue capaz de salvar tres bolas de partido; no obstante, la presión de Djokovic con el revés cruzado hizo su efecto, convirtiendo el definitivo punto y metiéndose en octavos de final.

Djokovic jugará ante 'La Armada' en octavos

Final: 7-6 (2) y 6-2 en una hora y 47 minutos. Novak Djokovic certifica su pase a los octavos de final del Masters 1000 de Roma en un disputado y trabajado encuentro por parte de ambos tenistas. El serbio, cuatro veces campeón aquí, espera un rival español en la siguiente ronda, que saldrá del duelo entre Pablo Carreño y Roberto Bautista.