Luego de tener una prematura derrota en Madrid ante Nicolás Almagro por 6-3, 3-6 y 6-1, Tommy Robredo volvía a la acción este lunes para reencontrarse con su juego y un ritmo competitivo que lo sitúe de la mejor forma posible de cara al segundo Grand Slam de la temporada, el certamen parisino de Roland Garros.

En esa búsqueda de buenas sensaciones el jugador español encontró en su rival un buen parámetro para ver el nivel actual que presenta. En los primeros juegos del primer set ambos tenistas mantuvieron sus servicios con claridad, hasta que en el quinto juego Skugor rompió el servicio del español y quedó 3-2 arriba en el marcador.

No obstante, la ventaja no le duró mucho, debido a que en el siguiente game Robredo le devolvió la gentileza y el set quedó igualado en tres juegos. De ahí en más, luego de mantener su servicio, el tenista español generó el desequilibrio final del primer parcial, después de romper en el octavo game el saque del croata y posteriormente con su servicio confirmar el quiebre sellando de esta forma el primer set por 6-3.

Resurgir croata

En el segundo parcial, el desarrollo del partido mantuvo una tónica similar a la del comienzo del primer set, ninguno de los dos tenistas marcaba una notoria diferencia con su juego y cada jugador mantenía su saque. Sin embargo, nuevamente la diferencia se propició en el octavo juego tras la rotura de servicio que obtuvo Skugor quien dejó el marcador 5-3 a su favor.

Así pues, en el siguiente juego el tenista croata confirmó el quiebre y se llevó la segunda manga por 6-3. Todo se definía en el tercer parcial. En el último set, Skugor dominó el trámite del encuentro y Robredo no pudo contrarrestar el juego del croata, quien quebró en dos oportunidades el saque del tenista español y se quedó con el último parcial por 6-2. De esta manera, en la siguiente ronda Franko Skugor tendrá que enfrentarse al estadounidense Sam Querrey.