La tierra batida es su peor superficie pero tirando de oficio y experiencia Karolina Pliskova ya se encuentra entre las cuatro mejores tenistas de Roland Garros. La checa enterró las opciones de la última jugadora local viva en el cuadro femenino, Caroline García, en un encuentro disputado en una abarrotada Philippe-Chatrier que presenció la derrota de su jugadora por la vía rápida. 

García cometió demasiados errores no forzados, 31, 18 menos que su rival

A excepción de ciertos momentos del final del primer set, la segunda cabeza de serie tuvo la iniciativa y el control del partido. Pliskova se mostró más consistente que una Caroline García un tanto atenazada por la presión de jugar ante su público. La francesa cometió muchos errores no forzados y aunque acabó superando a su rival en golpes ganadores, 29 por 25, no consiguió la consistencia necesaria para desbordar a la jugadora checa. 

Pliskova quebró el saque de la gala antes del primer descanso del set, una ventaja que mantuvo hasta el 5-3, momento en el que la pista central pudo disfrutar de los mejores instantes de su jugadora. García se agarró a la pista y atacando con mucha valentía el potente servicio de su rival, logró equilibrar nuevamente el marcador con un 'break' en el décimo juego y cuando Pliskova sacaba para ganar el set (5-5). Pero como ya se ha comentado, la tenista local no logró mantener la consistencia y en la muerte súbita los errores volvieron a aparecer en su raqueta, algo que Pliskova no perdonó para hacerse con el juego decisivo por 7-3. 

Pliskova no perdona

Tras un intenso y disputado primer set, una hora y cuarto de duración, la intensidad bajó notablemente en un segundo parcial en el que los servicios dominaron ampliamente. Ambas tenistas fueron ganando sus respectivos servicios con facilidad hasta que en el décimo juego la presión de sacar para mantenerse en el partido pudo con García. 

Pliskova está a sólo una victoria del número uno del mundo

Pliskova vio que era el momento de irse a por el partido y no perdonó. Con un gran globo ganador con su revés y un remate con su derecha, la checa certificó la victoria (6-4) y su pase a la penúltima ronda del torneo. 

En esa penúltima ronda, la pupila de David Kotyza buscará matar dos pájaros de un tiro: su primera final en París y la consecución del número uno del mundo, algo que hará si vence a su próxima rival, al rumana Simona Halep, tercera cabeza de serie y que también aspira a conquistar el cetro mundial que ahora corresponde a la alemana Angelique Kerber. Para ello, la rumana, que se ha sacado de la manga un partido casi imposible ante la ucraniana Elina Svitolina, tiene que vencer en París. De lo que no cabe ninguna duda es que será un choque de alta tensión entre dos estilos muy opuestos.