El alemán Marterer proveniente de la clasificación fue un hueso duro de roer para Thien, principalmente en el primer set. No solo la buena performance del alemán, sino que además no se lo notó firme en su debut en canchas de césped.

Thiem sufrió para sacar adelante el primer set

Thiem, que se caracteriza por su juego de control desde el fondo de la cancha, no se podía plantar en la cancha y luego de mantener su servicio en el cuarto juego con el saque del austriaco, el alemán logró colocarse con doble punto de quiebre, que el austriaco supo salvar con dos buenos servicios. Ambos mantuvieron su saque hasta el undécimo juego, donde la solvencia que había mostrado el alemán durante el primer set se desvaneció en este juego de saque cometiendo un sin número de errores no forzados que le permitió al austriaco quedarse con el primer set.

En el segundo set el austríaco continúo con problemas de estabilidad, adaptándose de a poco a la hierba. El alemán volvió a complicarlo en los primeros juegos del set, volviéndose a poner en doble punto de quiebre, que logró salvar Dominic luego de sostener una ondanada de magia que le tiró el alemán, fue el punto del día que le quedo para Thiem.

Desde ahí, Marterer se nubló, volvió a cometer los errores del duodécimo juego del primer set y cedió nuevamente el saque. Desdé ahí hasta el final, ambos mantuvieron sus servicios, sin sobresaltos, quedando el partido para Dominic Thiem por 7-5 y 6-3. Le falta estabilidad a Thiem, adaptar su juego al césped, este es el primer paso, de una de las mayores dificultades que tiene el circuito, pasar de la arcilla al césped.