David Goffin logró su séptima victoria consecutiva tras derrotar al australiano Matthew Ebden por 2-6, 7-5 y 7-6 en dos horas y veinte minutos de partido. El belga supo sufrir y avanzó a los cuartos de final donde se verá las caras con Richard Gasquet.

Inicio aplastante de Ebden

Fue una auténtica barbaridad el inicio del encuentro del australiano, este se adelantó 5-0 e incluso tuvo una bola para lograr el rosco ante el número 11 del mundo. Ebden mantuvo su primer juego al saque a 30, rompió el saque de Goffin a la tercera oportunidad y consolidó la rotura a 15 para poner el 3-0. El belga era incapaz de reaccionar ya que su rival lo estaba metiendo absolutamente todo, Ebden logró una nueva rotura, esta vez a 30 que ponía el 4-0. El australiano puso el 5-0 y tuvo una bola de rotura y de set que confirmaría el rosco pero no pudo convertirla y Goffin logró su primer juego del encuentro para poner el 1-5. El belga empezó a confiar más en su tenis tras ganar su primer juego y logró su primera rotura a 30 para poner el 2-5. Aun así, era demasiado tarde para reaccionar ya que Ebden se llevó el primer set por 6-2 al lograr su tercera rotura de la manga.

Goffin empieza a reaccionar

Ebden comenzó bien el segundo set manteniendo su saque a 30, esta vez no lograría igualar el comienzo del pasado set ya que Goffin subió su nivel para empatar a uno y posteriormente para romper el saque con una gran derecha paralela. El belga consolidó para poner el 3-1 con su juego más cómodo al saque del partido. Hubo seis juegos consecutivos sin roturas, ni tan siquiera hubo bolas de rotura ni 40 iguales, cada tenista mantuvo su saque tres veces consecutivas sin ningún problema. Con Goffin sacando para set Ebden logró un juego muy bueno al resto que acabaría con una rotura por parte suya para poner el 5-5. Aun así, Goffin volvió a romper el saque a pesar de que su rival estuvo 30-0 arriba y pudo volver a sacar para igualar el partido a un set. Un gran jugador falla una vez, pero no suele fallar dos, y esta vez ese dicho se cumplió, ya que Goffin logró un juego en blanco y finalmente cerró el set para igualar el partido.

Final muy movido

Los cuatro primeros juegos fueron para el sacador, Ebden mantuvo los dos a 30 (uno tras darle la vuelta a un 0-30) y Goffin los hizo en blanco. La primera rotura fue del belga ya que aprovechó a las mil maravillas un 15-40 para pegar el primer golpe en la mesa del set definitivo. El número 11 del mundo consolidó la rotura salvando previamente una bola de rotura en un juego bastante largo. El australiano parecía bastante tocado mentalmente y físicamente y volvió a perder su servicio a 15 para darle una ventaja de 5-2 a Goffin. Todo parecía sentenciado pero Ebden resucitó de la nada, logró una rotura a 30 para poner el 3-5 y mantuvo el saque para poner más presión incluso con el 4-5. Ebden con un soberbio passing de derecha culminaría la remontada y pondría el 5-5 en un partido donde todo parecía acabado. El australiano salvó una bola de rotura y logró su cuarto juego consecutivo para poner el 6-5. Goffin mandó el set y el partido a una decisiva muerte súbita con un cómodo juego en blanco.

La muerte súbita no tuvo apenas ninguna historia, Ebden logró el 1-0 pero desde ahí todos los puntos fueron para Goffin que dominó de principio a fin todo el desempate final. Logró siete puntos consecutivos y acabó el partido con un resto ganador de derecha.