La temporada del deporte de raqueta por excelencia va tocando, poco a poco, a su fin. A menos de un mes de acabar con el tenis en este 2017, varias citas de alto nivel pondrán el broche de oro a un año de sorpresas, llegadas y salidas. Iniciando esta recta final nos encontramos con los dos últimos ATP 500: Basilea y Viena; dos torneos de una gran importancia dada la necesidad, de varios jugadores, de certificar su presencia en las Finales de Londres. Todavía con dos plazas por ocupar, y con cinco tenistas con opciones reales, la atractiva ciudad de Viena se prepara para acoger a ocho Top-20 que harán las delicias del público austríaco, que se decantará, sin duda alguna, por su joven y prometedor pupilo, Dominic Thiem, que querrá emular las antiguas hazañas de los Horst Skoff o Jürgen Melzer, únicos locales en coronarse campeones.

Grandes nombres copan el historial de campeones en este ATP 500, protagonizado en estos últimos tiempos por raquetas de la talla de Andy Murray, que no podrá defender los 500 puntos logrados el año pasado, David Ferrer, Del Potro, Tsonga, Djokovic, Federer, Agassi o Becker. Buscando un lugar en este Olimpo de tenistas, serán Zverev, Thiem, Dimitrov o Carreño los grandes favoritos en un certamen con un sabor especial.

Muchas opciones en la parte alta del cuadro

Variadas y numerosas candidaturas las que se presentan en esta primera franja del ATP 500 de Viena. Jugadores jóvenes, con recorrido, y otros dispuestos a hacer saltar la banca conforman una mitad heterogénea y, a priori, muy igualada. Partiendo como primer cabeza de serie, y siendo, sin duda, el rival a batir, Alexander Zverev busca seguir agrandando su figura, que en este 2017 ya le vio conquistar dos Masters 1000 y, desde hace ya varias semanas, asegurar su presencia en su primera Copa de Maestros. Zverev, una de las grandes noticias de la temporada, no tendrá un debut cómodo, habiendo sido emparejado con el veterano serbio Viktor Troicki, un tenista que hará valer su dilatada experiencia. Con todo, el favoritismo recae en el lado del germano, capaz de adaptarse a todo tipo de escenarios, y con un ADN competitivo pocas veces visto.

El principal escollo para el menor de los Zverev de cara a la gran final será otra de las grandes revelaciones de la temporada, Pablo Carreño-Busta. El asturiano, miembro fugaz del Top Ten, del que salió, en favor de Goffin, hace unos días, necesita una gran actuación en tierras vienesas si quiere tener sitio en unos Masters a los que también opositan Querrey, Anderson o Del Potro. Carreño, campeón en Estoril y semifinalista en Indian Wells y US Open, no viene mostrando su mejor versión desde su gran actuación en Flushing Meadows, y la presión por poder disputar las Finales puede hacer mella en el gijonés.

Tomando como ejemplo a compatriotas como Verdasco o Ferrer, partícipes del prestigioso torneo londinense, Pablo Carreño tendrá que derrotar en primer lugar, si quiere dar un paso de gigante hacia Londres, al argentino Guido Pella, y con la posibilidad de medirse, en octavos de final, al ganador del cruce entre el italiano Fabio Fognini y el argentino Diego Schwartzman, reciente finalista en Amberes y firmando una espectacular gira indoor. Difícil papel para Carreño, que debutará ante un hombre que ya suma dos partidos en Austria tras haber superado la fase clasificatoria.

Resacosos todavía de sus victorias esta semana en los ATP 250 de Amberes y Moscú, Jo-Wilfried Tsonga y Damir Dzumhur esperan no acusar el cansancio acumulado en una nueva semana de tenis para ellos, a la que llegarán muy motivados y con la intención de seguir sumando triunfos. El francés, verdugo de Schwartzman en la ya citada final de Amberes, suma ya 16 títulos, los mismos que Wawrinka, tendrá un complejo debut ante el ruso Karen Khachanov; el moscovita, con más de 1.000 puntos, competirá en esas Finales de la Next Gen, de las que Alexander Zverev forma ya parte desde hace varios meses, y un buen papel en Viena se presenta difícil, teniendo que medirse a uno de los pesos pesados del circuito.

En la que será una reedición del torneo de Moscú, Damir Dzumhur confrontará al lituano Ricardas Berankis en la primera ronda, un Berankis que llevaba cinco años sin jugar una final, y que se reencontró con su mejor tenis; Dzumhur, haciendo historia para el tenis de su país, suma dos títulos en tres finales en este 2017, posibilitando ubicar a Bosnia en el mapa tenístico y tener en el punto de mira un preciado Top-30.

Cerrando esta primera ronda tendremos un duelo entre veteranos, cuando Gilles Simon se mida al letón Ernests Gulbis, siempre controvertido, que llega invitado por la organización. Además, el australiano Bernard Tomic, hundido en el ranking, debutará ante el francés Pierre-Hugues Herbert, procedente de la qualy.

Dominic Thiem, ante una sobrecargada parte baja

La parte baja en este ATP de Viena ubica al claro protagonista en su edición de 2017: Dominic Thiem. Por ranking, estilo y origen es el gran reclamo en el certamen austríaco; jugando en casa, el de Wiener-Neustadt contará con un factor extra, que podrá beneficiarle en ciertos puntos del torneo, ante rivales de peso. No obstante, las sensaciones con las que llega el tenista local a este su torneo no son las más propicias.

Cerrando una gira asiática nefasta, en la que no obtuvo casi ninguna victoria, Thiem deberá reencontrarse consigo mismo para superar un más que complicado debut ante el ruso Andrey Rublev. Clasificado ya para la que será su segunda Copa de Maestros consecutiva, Dominic necesita de su tenis incisivo y letal desde el fondo de pista para acabar con otra gran revelación en este 2017; Rublev, principal valedor del tenis ruso actualmente, ya ha conquistado su primer título ATP, en Umag, y su ascenso definitivo es inminente. A la vuelta de la esquina, en octavos de final, espera un duelo generacional, ya que en primera ronda se miden también Feliciano López, campeón aquí en 2004, y Richard Gasquet.

Tras perder la final del ATP 250 de Estocolmo y recibiendo una invitación para aparecer en Viena, el búlgaro Grigor Dimitrov constituye otra de las grandes sensaciones de la competición. El de Haskovo, lejos de aquel jugador que no levantaba cabeza el año pasado, representa una de las principales amenazas a cada torneo que acude, y Viena no será una excepción. Campeón en tres de las cuatro finales disputadas este año, Dimitrov ya cuenta con un título de Masters 1000, en Cincinnati, y asegurada su presencia en Londres por primera vez en su carrera iniciará el asalto al torneo de Viena ante un tenista local, Dennis Novak, la gran sensación de la fase previa. Inicio teóricamente sencillo para un Grigor Dimitrov que podría vérselas en segunda ronda con un español, David Ferrer, que no tendrá un fácil primer compromiso: Kyle Edmund.

Dos posibles aspirantes a las Finales ATP compartirán sector en Viena. Sam Querrey y Kevin Anderson pelearán hasta la última bola por hacerse con una plaza en el Reino Unido, y es que su año 2017 será inolvidable para ellos. Como sexto favorito, el campeón de Acapulco y Los Cabos, Querrey, le pisa los talones a otro partícipe en Viena, Pablo Carreño, por lo que la urgencia y la presión jugarán papeles importantes esta semana. El norteamericano no tendrá un plácido arranque de competición, ya que al otro lado de la red se encontrará el catalán Albert Ramos, experimentando, también, un año idílico.

El séptimo preclasificado, Kevin Anderson, ve en ésta la superficie ideal para su rápido y directo juego basado en el servicio; finalista en el US Open, el sudafricano se vio envuelto en una dura lesión no hace mucho, y los 180 puntos que le separan de Carreño no parecen barrera para un jugador renovado, mejorado, y que debutará ante el quinto representante de "La Armada" en tierras austríacas, Guillermo García-López, verdugo de Janowicz y Stakhovsky en la previa.

Clausurando este análisis del cuadro en Viena, un alicaído Pablo Cuevas hará frente al alemán Jan-Lennard Struff, protagonista de varias sorpresas hasta el momento, mientras que el francés Lucas Pouille tendrá al público en contra cuando se mida al wild card austríaco Sebastian Ofner.