Nadie habla de Madison Keys, nadie la mete dentro de las candidatas a ganar el título, aunque llegó a ser finalista en el US Open, pero la norteamericana ya se encuentra en octavos de final del Open de Australia, tras derrotar en poco más de una hora a la 104 del ránking WTA, Ana Bogdan, por 6-3 6-4 en el primer turno de la segunda pista en importancia del primer Grand Slam de la temporada, la Margaret Court Arena. Se medirá por un puesto en cuartos de final ante la francesa Caroline Garcia, que derrotó en tres mangas a la bielorrusa Sasnovich (6-3 5-7 6-2).

Primer duelo entre estas dos jugadoras, y que se decidió, básicamente, por las roturas de saque de Keys. Un break en cada parcial de la estadounidense decidió el choque. En el primer set, a la cuarta bola de rotura que tuvo la exnúmero siete del mundo, rompió, en el octavo juego del partido, para colocarse 5-3 y saque para cerrar la primera manga por 6-3 en 34 minutos.

Misma situación en la segunda manga, solo que el break llegó un poco antes. En el tercer game, Madison Keys rompió el saque de la rumana para poner el 2-1 en el marcador y certificar la rotura con su saque.  En el transcurso del parcial, cada una fue manteniendo su servicio con relativa comodidad, hasta que llegó ese juego clave, el saque para cerrar el partido, ese que siempre cuesta. Keys tuvo que salvar hasta tres bolas de break que podían meter de lleno en el partido a Ana Bogdan.

No las aprovechó la rumana y la norteamericana, en el primer match point, mandando una derecha a la línea, celebró con un "¡Come on!" su billete para los octavos de final del Open de Australia tras cerrar la segunda manga por 6-4. En esa ronda,se medirá a la número siete del mundo, Caroline Garcia. Paso a paso, va avanzando en el cuadro Madison Keys sin acaparar muchos focos. Puede convertirse en la gran "tapada" del torneo.

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