No era el duelo más atractivo de la jornada, ni por las características de ambos tenistas ni por las condiciones de la pista, pero el cuadro así lo había deparado. Sam Querrey Ivo Karlovic se citaron en los cuartos de final del Open de Nueva York. Como se suponía, el partido se iba a decidir en pequeños detalles, o dicho de otra forma, en los desempates. Y es que ambos tenistas demostraron porque son dos de los mejores cañoneros del circuito como así deparó la estadística al final del partido (tan solo 22 puntos al resto en todo el partido y 26 saques directos entre los dos en tan solo dos sets), pero finalmente la victoria terminaría cayendo del lado de Querrey (7-6(5), 7-6(4)).

Desde el primer momento se pudo entrever el tipo de partido que se iba a poder ver entre estos dos maestros del servicio. Aún así, el americano consiguió encontrar un par de resquicios al resto para conseguir un par de puntos de rotura, pero Karlovic iba a solventarlos sin mayores problemas. Con intercambios de menos de cinco golpes de media, el desempate era inevitable. Al inicio del mismo, un error del croata con la volea iba a dar una ventaja suficiente a Querrey para terminar adjudicándose la primera manga.

En el segundo set, el dominio de los servicios fue aún más apabullante y ninguno de los dos tenistas consiguió ganar más de dos puntos al resto en un mismo juego. En el segundo desempate del partido, sería otra vez Querrey quien se mostraría mucho más acertado y tras conseguir dos puntos con el saque de Karlovic, cerraría el encuentro con su cuarta bola de partido.

El rival de Querrey en semifinales será un perfil muy diferente al de Karlovic. Se trata del francés Adrian Mannarino, que hoy ha vencido en el primer encuentro de cuartos de final al único español del cuadro, Adrián Menéndez-Maceiras (7-5, 2-6, 6-3).