Varios años de esfuerzo y trabajo han llevado a la LVP a lo más alto a nivel nacional. Con una gran repercusión en la población española y grandes éxitos año tras año tanto en Gamergy, que aumentó su audiencia en un 10% con respecto a la última edición, grandes empresas han mostrado su interés en ella. Orange y Mediapro ya se han hecho un hueco en el apartado de los e-Sports uniéndose a la Liga de Videojuegos Profesional (LVP) y sustituirán la antigua División de Honor por la nueva Superliga Orange, denominada la “revolución de los e-Sports en España”.
En la previa del enfrentamiento final entre ASUS ROG Army y G2 Vodafone que tuvo lugar el pasado fin de semana en Gamergy se proyectó un vídeo que presentaba el nacimiento de la nueva liga, noticia que provocó cierto asombro en el público que se encontraba allí ya que era lo que menos se esperaban.
A pesar de que muchos no estén conformes con ella, la entrada de Orange provocará un cambio positivo en la competición. Para ello ofrecerán un sistema de retribución máxima que supone un pago mínimo a todos los clubes, parecido al de La Liga de Fútbol Profesional, con lo que buscan reforzar los proyectos deportivos, aumentar la exposición de los clubs y su profesionalización para que la liga se posicione como un referente mundial.
La Superliga Orange contará con dos nuevos platós de formato televisivo situados en el edificio IMAGINA situado en Barcelona. En ambos tendrá lugar las emisiones de League of Legends, Counter-Strike y Call of Duty que abarcan la LVP, con los análisis y partidos de liga. Con una mejor producción audiovisual, la profesionalización de la competición y una mayor distribución de los contenidos, la Superliga Orange contribuirá a situar a la LVP como un referente mundial, lo que supondría un auge en los deportes electrónicos de nuestro país.
Además la Liga de Videojuegos organizará un nuevo circuito de eventos presenciales que llevará la experiencia de la Superliga Orange por toda la geografía española, y que se anunciará en unas semanas. Comienza una nueva etapa en el deporte de España, esta vez en los videojuegos.