América jugó de nuevo en la primera división del fútbol colombiano después de cinco años. El conjunto escarlata igualó 0-0 ante Rionegro Águilas en su regreso, ante su hinchada en el Pascual Guerrero.

Fue un primer tiempo aburrido, sin ritmo, sin sorpresas. Un Rionegro bien parado en defensa, que cada vez que el local se acercaba al arco destruía toda posibilidad de riesgo en el arco de Ernesto Hernández. El primer acercamiento lo tuvo América con una sociedad formada por Jeison Lucumí y Cristian Martínez Borja. Luego sería Rionegro el que tendría la oportunidad de generar peligro con Daniel Muñoz. Terminando la primera etapa, Luis Páez tuvo la opción de anotar pero no logró vulnerar la valla de Carlos Bejarano.

Para el segundo tiempo, los de Hernán Torres salieron más decididos a llevarse el encuentro. Ernesto Hernández comenzó a volverse la figura del encuentro evitando que el conjunto americano vulnerara su arco. Torres le dio paso a Jonathan Álvarez para buscando que América fuese más profundo, y a partir de ahí, el equipo comenzó a llegar con más claridad, peimero con Martínez Borja que falló frente al arco luego de que él mismo iniciara la jugada, luego Álvarez recibiera y se la dejara servida con el pecho. Después fue el volante paisa que tuvo una ocasión clarísima para abrir el marcador, pero Ernesto Hernández evitó increíblemente que el tanteador se pusiera a favor de los escarlatas y dejando en tablas el marcador final.

Lastimosamente el regreso de la mechita no fue de la forma que soñaba, pero a pesar del empate que dejó su sinsabor en el equipo, deja muestras también de un equipo que con el pasar del tiempo se encaminará mejor y empezará a sacar resultados favorables. Es prematuro juzgar lo que se avecina y por ahora se debe pensar en el Deportes Tolima, el rival de la segunda fecha.