De tener un año glorioso en el 2015 tras conseguir después de diez años su tan anhelada novena estrella bajo la dirección de Fernando Pecoso Castro y su kinder, el 2016 fue quizás un año amargo y para el olvido para el Deportivo Cali

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De las cuatro competencias que afrontaba el cuadro azucarero se fue con las manos vacías. En Copa Libertadores aún bajo el mando del Pecoso fracasó tras las goleadas ante Bolivar y Boca Juniors. En la Liga Águila I cayó en cuartos de final ante Atlético Nacional, en Copa Águila no pudo con el Deportes Tolima y el segundo semestre de la liga cayó ante un Atlético Bucaramanga un equipo que el año pasado jugaba en la Primera B

Quizás nadie se esperaba una temporada tan vacía para un Deportivo Cali que apuntaba a ser uno de los equipos con mejores refuerzos en el segundo semestre. Todos señalaban al equipo verdiblanco como uno de los grandes favoritos a ganar el título de la Liga Águila II ya que contaba con grandes jugadores de experiencia, renombre y estaban bajo el mando de uno de los mayores referentes del fútbol colombiano, como lo es Mario Alberto Yepes, el gran ex capitán de la selección Colombia. 

Pudieron más las expectativas que la realidad. Una realidad un poco dolorosa para la hinchada azucarera que tras el fracaso en Copa Libertadores y en el primer semestre de la liga, exigían a las directivas jugadores con experiencia e incluso un nuevo técnico. Ello se hizo realidad, en el segundo semestre el Deportivo Cali ya con pocos juveniles le imprimió a su nómina experiencia, con jugadores como Mayer Candelo, Abel Aguilar y Aquivaldo Mosquera, bajo la dirección del nuevo técnico Yepes, generó alegría y gran aceptación en la hinchada verdiblanca

Pero esa alegría y aceptación duraría poco. Los refuerzos no dieron el nivel que se esperaba y el cuerpo técnico reflejó en varias ocasiones su inexperiencia bajo la dirección de un equipo de primera, que hicieron opacar al equipo hasta llevarlo a la eliminación en cuartos de final. 

Refuerzos como Aquivaldo, el chileno Ronnie Fernández y John Freddy Pajoy fueron los refuerzos que en ves de aportar al Deportivo Cali, le hicieron caer en baja en la zona defensiva y en la delantera.

La inexperiencia del técnico Yepes, era reflejada en la forma que organizaba al equipo e incluso en los cambios. Quizás aún él no estaba preparado para dirigir un equipo de primera, quizás debió empezar por un equipo de la Primera B. Lo que si es cierto es que pasó de ser un ídolo verdiblanco a ser el malo de este fracaso. 

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Sobre el autor
Daniela Rojas
comunicación social - periodismo, en la Universidad Autónoma de Occidente.