Tomando como referencia que en Costa Rica la nota para aprobar la mayoría de los exámenes es 70 (de 100), si el campeonato de este país fuera una prueba académica, los 11 equipos de la primera división estarían aplazados. Esto, observando el rendimiento de los clubes miembros de la división de honor costarricense. Ninguno alcanza el setenta por ciento.

El mejor equipo del país centroamericano es Pérez Zeledón, que se encuentra en la primera casilla de forma inesperada. Los sureños son primeros con 34 puntos obtenidos de 51 posibles, debido a las 17 fechas jugadas por ellos. El rendimiento de los dirigidos por Mauricio Wright es de un 66,6 %.

Mientras tanto, el segundo lugar es para el Santos de Guápiles. Ellos, con un juego menos que los líderes, tienen 31 puntos (de 48 posibles). Esto se traduce en un 64,58% de rendimiento para los caribeños. Tampoco aprueban.

Además, el nivel de los cuatro equipos tradicionales ticos también es deplorable. No llegan a alcanzar el 60% si quiera. Por ejemplo, Saprissa y Cartaginés apenas llegan a un 56%, mientras que Alajuelense tiene un 52% y Herediano un 49%.

Pero si los equipos tradicionales andan mal, ni que decir de Orión, que ocupa el último puesto. El equipo de la constelación solamente alcanza un 16%, en 16 juegos. 

A falta de cuatro fechas, aún no se definen los clasificados para la siguiente ronda. De cuatro cupos disponibles, hay ocho equipos en disputa. Solamente están fuera de competición, Puntarenas FC, Limón y Orión. Sin embargo, los dos últimos luchan por el no descenso a la segunda división.

Rendimientos:

Pérez Zeledón: 66,6% (17 juegos)

Santos: 64,58% (16 juegos)

Saprissa: 56,25% (16 juegos)

Cartago: 56,25 (16 juegos)

Herediano: 49% (17 juegos)

Alajuelense: 52% (16 juegos)

San Carlos: 52% (17 juegos)

Belén: 45,83% (16 juegos)

Puntarenas FC: 29,4% (17 juegos)

Limón: 27% (16 juegos)

Orión: 16% (16 juegos)

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