Aires de tranquilidad son los que se viven en la tienda millonaria, pero esta tranquilidad no se traduce en conformismo. Las ultimas victorias sirven para trabajar mejor y con paciencia. Hacer respetar el Coliseo Azul y Plomo, que no conoce la derrota, es donde se cimienta esta actualidad eléctrica.

Los jugadores están consientes que han cometido errores en especial luego de la segunda doble suspensión de sus centrales estelares sumada a la lesión de José Luis Quiñonez y a falta de dos días para el partido de vuelta ante Fluminense, la concentración es máxima centrados por la posibilidad, fehaciente, de una clasificación a los 4tos de final de la Bridgestone Libertadores.

El resultado (2 -1) que obtuvo El Ballet en la ida sirvió para que el plantel dirigido por quinteros sacara conclusiones sobre que esperar de su rival y sobre su desempeño en el ultimo partido, espera revertir la imagen de un equipo sin ideas.

La recuperación del paraguayo Giménez es un alivio para el DT, el único que confía en las habilidades  del zurdo volante, y se unió a la nomina que esta en Brasil a la expectativa del partido que se jugará en el mítico estadio Maracaná.

La reciente experiencia adquirida por el cuadro ecuatoriano es un plus que tienen y a esto se suma lo irregular que es el actual campeón del Brasileirão como local por copa aunque marcha segundo en el campeonato carioca.

Los azules marchan primeros en el campeonato local y quieren continuar con los buenos resultados a la espera del apretado calendario que lo obligan a rotar sus alineaciones.