En el ambiente todavía se respira aquellas ganas de triunfo y la manera en que tuvieron que consolar a sus jugadores tras el encuentro. “Eso lo hizo duro”, dice Llena sobre las lágrimas que cayeron en el vestuario nica. Los españoles ven esto con ojos plenamente futbolísticos y con argumentos que no salen del rectángulo de juego, por lo que el optimismo sigue envolviendo sus hojas de apuntes.

Para empezar, ¿Cómo están?

Llena: Un poco decaído ya que a nadie le gusta quedar eliminado de esa manera, pero también contento por la imagen que ha dado Nicaragua.

Catalá: Fue una experiencia bonita y única. Todo el mes de concentración estuvo muy bien y el comportamiento fue ejemplar. Volvimos frustrados porque todo cuadraba para hacer algo histórico y en el momento clave no se pudo conseguir, y todo por circunstancias del juego.

¿Qué fue lo mejor de Nicaragua en esta Copa?

Llena: La actitud, los partidos fueron peleados y tuvimos la mejor actitud. El mejor regalo fueron los mensajes telefónicos de los jugadores tras la eliminación y eso es lo que hace bonito nuestro trabajo.

Catalá: El ánimo de los jugadores para cumplir todo, tanto en entrenamientos como en cuestiones tácticas. Estuvieron confiados de hacer algo y su manera de afrontar esto para nosotros fue una alegría.

El juego de Guatemala estuvo para más...

Llena: Fue un juego muy abierto. La segunda parte estuvo todo mal. Pudo ganar Nicaragua y pudo ganar Guatemala. La segunda parte para el público fue bonita porque era de tú a tú, pero para un entrenador hay que analizarla porque estuvo bastante mal estando muy abiertos y con distancia entre líneas. Quisimos ir al ataque un poco a lo loco sin pensar y descuidando la defensa.  

¿Sorprendió el bajo rendimiento de los chapines?

Catalá: Sorprendidos no estábamos porque habíamos visto los últimos dos partidos. Fue una situación rara para ellos con la renovación y con el técnico ya de salida. Jugaban de manera extraña, muy directos. Sabíamos que teníamos opciones para hacer daño.

 ¿Se pudo haber tenido un mejor control del partido jugando más inteligente?

Llena: Era el primer partido y sabíamos lo que nos jugábamos. Salimos a ganarlo pero en la segunda parte demasiado alocadamente. El primer partido de un torneo es muy complicado y sumar siempre es positivo.

Costa Rica era el rival más difícil en pintura, ¿Lo fue?

Llena: Si, los ticos sin haber demostrado mucha superioridad si que fueron los más fuertes que nos enfrentamos. Estuvimos haciendo un buen trabajo y los goles vinieron en un corner y en error de marca pero hubo momentos que fueron inferiores a nosotros.

¿Qué fue lo mejor de Nicaragua en ese partido?

Catalá: Ese partido tuvimos pocas opciones a pesar de ponerles en dificultad a nivel de juego. En la segunda parte les tuvimos incómodos y se jugó bien. Se pudo haber hecho algo de daño, pero opciones  de gol no creamos. Para mí que fue de los tres partidos el peor. Lo bueno fue como nunca nos vinimos abajo ni nos desmoralizamos, intentamos remontar e hicimos que estuvieran incómodos que es poca cosa porque queríamos hacer más.

La prensa internacional gustó del planteamiento de Nicaragua ante el estilo tico. ¿Se había preparado ese repliegue?

Llena: No, pero el repliegue fue más que nada por lo que apretaba Costa Rica. Tampoco fue como que estuvimos tan replegados. Después del gol de ellos estuvimos muy bien como quince minutos. Si que fue distinto el planteamiento porque sabíamos como jugaban ellos por banda. Ellos en ningún momento estuvieron cómodos, y hay un detalle de Pinto que va a recoger un balón y lo deja pasar para perder tiempo, ellos dejaban pasar el tiempo porque no les dejábamos jugar.

 ¿Qué se les dijo a los muchachos antes del partido de Belice?

Llena: Yo recuerdo que había mucha tensión por la responsabilidad. Les dije que teníamos que ganar, que hicieran lo que quisieran, pero que teníamos que ganar. También mencioné que teníamos 90 minutos para hacer un gol y pedí tranquilidad, que solo necesitábamos un gol. Pedí paciencia y que no tuvieran ansiedad para que no hubiera precipitación, y ahora a lo mejor fue un error porque aunque todo es verdad, nadie sabe qué hubiera pasado si he mandado a morder los primeros diez minutos y a anotar el gol rápido.

¿Hubo exceso de confianza en los muchachos?

Catalá: No, quizás exceso de responsabilidad. Los chicos sabían que era algo histórico para el futbol nicaragüense y salieron con esa mentalidad. Ellos estaban muy responsabilizados y así asumieron los partidos. Tenían la presión de ser superiores a Belice y tenían que demostrarlo y ganar. Lo que nos hizo falta fue claridad y rapidez en los pases.

Llena: Cuando íbamos al estadio se notaba en el silencio porque sabíamos lo que íbamos a jugar. No estoy de acuerdo con una crítica que habíamos sido prepotentes en el juego, que nos habíamos creído el Barcelona. Yo estoy claro, y lo volvería a hacer ya que a ras de piso es que se tenía que jugar. Creo que por nuestro juego el técnico de ellos dijo que éramos los mejores de la Copa y aunque es una opinión personal, es respetable. No sé si fuimos los mejores, pero fuimos una Selección que llamó la atención y que gustó a muchos aficionados.

Nicaragua mostró carencias ofensivas tal y como se habían visto en los amistosos antes de la Copa, ¿Por qué no cambiar algo que no había funcionado?

Llena: Las carencias son por falta de jugadores. Aquí no tenemos jugadores que ya te puedan dar un gol por partido y ojala que aparezcan en las nuevas generaciones.

Catalá: No es fácil encontrar un Messi. Nosotros hicimos dos goles y casi todos los equipos hicieron dos goles a excepción de Costa Rica que hizo cuatro. Y ojo, que nosotros hemos hecho cuatro incluyendo el que nos anularon ante Guatemala y el autogol (risas).

¿Por qué no usar dos delanteros de área?

Llena: Siempre los tuvimos menos ante Belice que tuvimos tres en el primer tiempo y cuatro en el segundo. Había mucha movilidad, sobre todo ante Belice, porque jugaban con tres centrales y los abríamos un poco para complicarlos.

¿Por qué si Enrique Llena es un técnico ofensivo, lo más destacado internacionalmente de Nicaragua fue su parado defensivo?

Llena: El ser ofensivo no quiere decir que vas a descuidar la defensa. Hay que tener en cuenta que esto debe ser un bloque. No hemos hecho un repliegue intensivo siempre intentando salir a la contra, esa no es mi Nicaragua, la mía juega de tú a tú a quien sea.

¿Qué tanto dolió la derrota en lo personal?

Llena: Mucho. Es tener para conseguir la gloria y el cielo y de pronto no poder conseguirlo.

Catalá: Era mi primera experiencia y tampoco me sentí tan afectado, pero cuando ves la repercusión que habríamos tenido si clasificábamos te da un poco de rabia.

¿Se siente humillado al ser el primer técnico que pierde ante Belice?

Llena: Ni me lo había planteado. Es verdad que perdimos, pero es la primera vez que llegábamos al último partido que si se ganaba llegábamos a semifinales. Mirar esas cosas es una crítica que puede ser válida pero es muy pobre. En números puede que haya sido la peor Copa Centroamericana, pero en imagen y posibilidades creo que ha sido la mejor.

¿Fue su mayor golpe desde que está acá?

Llena: Si porque todos estábamos convencidos de ganar. Ya sabía que era muy complicado porque era difícil hacerles un gol pero sí que tenía esperanzas.

¿Volverá a dirigir Enrique Llena a una selección nicaragüense?

Yo tengo contrato hasta abril del 2014. Ahora no quiero pensar en eso porque ahora tengo un reto muy importante y complicado con la Sub-20. Cuando acabe esto ya meditaré y a ver si para abril hay alguna oferta.