Todo empezó cuando el martes pasado, cuando mediante un comunicado, la dirigencia de Nacional expresó que  “El Club Nacional de Football resolvió que toda la tribuna Olímpica será destinada a socios e hinchas del club”.

Las reacciones ante esta medida no se hicieron esperar. El vicepresidente de Peñarol, Edgar Welker, dijo al programa “La Oral Deportiva” de Radio Universal que la medida es discriminatoria. Agregó que es algo que no corresponde y “genera lo que todos queremos evitar: violencia”. Según él, tomar esta medida “es desconocer la tradición del fútbol uruguayo, porque desde que se inauguró el Centenario en 1930, la Olímpica es una tribuna que comparten las familias. Pero ahora Nacional nos quiere imponer una cultura que no es la uruguaya".

Más tarde, la directiva de Peñarol emitió un comunicado en el que dice que se está “violentando la más profunda cultura democrática que acompaña a los uruguayos desde siempre” y que ven con mucha preocupación que, en caso de mantenerse esa postura, "la fiesta de uno de los Clásicos más importante del mundo futbolístico se vea teñido de actos de violencia no deseados y por los cuales el C.A.Peñarol deslinda toda responsabilidad”.

El dirigente tricolor, Luis Bruno, habló con  Radio “El Espectador” y explicó las razones por las que el club decidió esa medida. Dijo que Nacional acordó con las autoridades esta decisión apoyado sobre dos razones fundamentales: en primer término porque “defiende el derecho de localía”, y en segundo término “se le está dando un aporte a la seguridad del espectáculo”.

El Historial

 

El 12 de mayo de 2010, en la primera final que disputaban Peñarol y Nacional por el Campeonato Uruguayo 2009/2010, hubo incidentes en la mencionada tribuna. El juez Larrionda paró el partido y llamó a la policía para que actuara, mientras hinchas de ambos equipos se tiraban proyectiles, ocasionando varios heridos.

Para la segunda final disputada el 15 de mayo del mismo año, la Jefatura de Policía, en conjunto con la Comisión de Seguridad de la Asociación Uruguaya de Fútbol y dirigentes de Nacional y Peñarol, resolvió que la Tribuna Olímpica fuera compartida. Si bien en su momento se había manejado que fuera enteramente para el local, que en ese partido era Peñarol, se decidió por la implementación de un “pulmón” separador, que tuvo como consecuencia la quita de 4000 asientos implicando una pérdida de 44 mil dólares de recaudación. Los directivos de Nacional concurrieron a dicha tribuna como “acto simbólico” e invitaron al presidente de Peñarol, Juan Pedro Damiani, a hacer lo mismo. Damiani rechazó la invitación alegando que “se necesitan soluciones, no actos simbólicos".

Tras el primer partido con Olímpica dividida, el dirigente y Jefe de Seguridad de Nacional, al ser consultado por el hecho, dijo que "la visión es que se desencadenó lo que venimos previendo hace mucho tiempo. Pero seguimos siendo líricos, y creyendo que las condiciones están dadas para que la tribuna sea compartida. En estas condiciones no se puede compartir más. Esto se veía venir, por eso yo insistí tanto con el tema de no compartir la tribuna y que la Olímpica sea para el local”.

El 15 de noviembre de 2010, se jugó un nuevo clásico por el Torneo Apertura, que terminó empatado sin goles. Para ese partido Nacional dispuso que la Olímpica fuera solo para sus hinchas. Sin embargo, la venta previa por medio de la cadena de cobranzas Abitab permitió que unos 3.000 hinchas carboneros hayan podido comprar entradas para esa tribuna. Este incidente determinó que la policía tuviera que cambiar el operativo de seguridad, pero no se registraron incidentes.

En ese momento, Peñarol también protestó por dicha medida y Ricardo Alarcón, presidente de Nacional, se mostró "dolido" por el rechazo de su tradicional rival "cuando lo que correspondía era que nos aplaudiera". Además aclaró que la determinación tenía como fin "que la Olímpica no se llene de indeseables".

En los clásicos amistosos de verano de enero de este año (Copa Bimbo y Copa Bicentenario), la Olímpica albergó a hinchas de ambos clubes. El último clásico fue el del Torneo Clausura pasado. Allí Peñarol fue local y le dio a Nacional un pequeño sector, separado por vallas.

La decisión de la directiva de Nacional está tomada. La Tribuna Olímpica será solo para la hinchada de Nacional. El ambiente está caliente y se habla más de eso que del partido en sí.