Mauricio Victorino empezó el 2013 con el pie izquierdo. Un problema en el tendón de Aquiles que ya venía arrastrando silenciosamente lo volvió a alejar de las canchas.

"El año pasado jugué el año entero con una lesión en el tendón de Aquiles derecho, que interfería con mis movimientos. Jugaba con dolor y no estaba al 100 por ciento", declaró el zaguero montevideano en rueda de prensa.

Por estos días trabaja separado del grupo y muy supervisado por el cuerpo médico del club. "Ahora estoy haciendo un tratamiento que comenzó en Uruguay durante las vacaciones. Vamos a continuarlo con los profesionales de aquí para poder estar bien y volver a jugar sin dolor y sin preocupación, como lo hacía antes".

Sobre la lesión que venía llevando la temporada pasada, manifesto que "Continuar jugando fue una decisión que tomamos juntos. Yo ya estaba sintiendo dolores, el departamento médico me hacía tratamientos para aliviar el dolor, pero no pasaba (..) llegó un momento en el que hablé con los médicos porque no conseguía andar bien. Ahí tomamos la decisión de parar, además porque no estaba siendo tenido en cuenta", puntualizó.