Un punto que es Bueno

Gran partido el vivido en el Estadio Belvedere entre 2 posibles animadores del Torneo Clausura, Liverpool que venía de vencer bien en el Franzini ante Defensor y Wanderers que de local había doblegado a Cerro. Ya de arranque fue movido, Liverpool aprovechó que el visitante entró dormido al cotejo y en el primer minuto Chevantón avisó con una ocasión nacida en un saque de banda donde el de Juan Lacaze no pudo convertir al quedarle un poco atrás el esférico. Solo una vuelta de reloj después el negriazul si lograba adelantarse en el tanteador en otro saque de banda, esta vez desde la derecha, donde Gonzalo Freitas desbordó y su centro raso le quedó a Paulo Pezzolano que con un golpeo seco de zurda marcó el primer gol del partido.

El local se sintió cómodo y dominó en la primera media con gran trabajo de Pezzolano y de Aguirre, mientras que el bohemio se despertó recién luego de un tiro libre en donde Mauricio Gómez estuvo apunto de igualar pero entre Guillermo De Amores y el palo le dijeron que no al lateral derecho del conjunto de Alfredo Arias. Minutos más tarde una buena intervención del arquero de la selección juvenil en un mano a mano con Gastón Rodríguez, también evitó el empate, ahí Wanderers ya había un paso adelante siempre fiel a su estilo de toque y combinaciones. La primera mitad acabó con victoria sobre la mínima de Liverpool en donde quizás se esperó un trámite con más oportunidades de gol pero sin duda lo mejor llegaría en el complemento.

Gol de Chevantón que dejaba todo a favor de Liverpool

El comienzo del segundo tiempo fue como el primero, con el local más asentado en el terreno de juego, con las ideas más claras y así al equipo de Favaro le llegó el gol en forma de premio, una contra que comenzó el pacence Moreno y Fabianesi enviando un balón en largo para Rodrigo Aguirre que ante la salida del meta Sebastián Cristóforo envío un centro que no pudo cerrar bien Gastón Bueno y la pelota rebota en Javier Chevantón que casi sin querer marcó el 2-0 en el partido de su vuelta al fútbol uruguayo luego de 13 años en el exterior. Alegría en la parcialidad negriazul con esta diferencia que invitaba a pensar en que el encuentro ya estaba controlado más teniendo el conjunto local a jugadores de amplia trayectoria como Pezzolano, Chevantón, Moreno y Fabianesi, Raul Ferro y Gonzalo Godoy.

El segundo gol cayó como un balde de agua fría para los de Arias que por unos minutos se vieron arrasados por un Liverpool que pudo marcar en varias contras mediante Jorge Puglia, que había suplantado a un aplaudido Chevantón, y sobre todo Pezzolano que con una gran jugada personal estrelló una pelota en el vertical. 

Arias mueve la pizarra y llega la reacción de Wanderers

El técnico bohemio que en el descanso había dado ingreso a Matías Santos en lugar de Rodrigo Pastorini, luego del segundo gol se la jugó quitando un defensa central como Martín Díaz para darle debut a un punta de la cuarta división llamado Kevin Ramírez, luego Diego Riolfo dejó su sitio a Nicolás Albarracín que volvía a vestir la camiseta de Wanderers luego por su paso por la Spezia de la Serie B italiana donde una prolongada lesión lo había al margen varios meses siendo su último partido en mayo contra el Módena. Favaro al ya mencionado cambio de Puglia quiso arreglar los problemas del sector derecho cambiando a Agustín Peña para colocar a Andrés Ravecca y luego ganó pulmón quitando al veterano Moreno y Fabianesi ingresando el sanducero Lucas Tamareo.

Estos cambios favorecieron claramente a Wanderers que con 3 defensas y 4 puntas fue claramente a la desesperada en busca del gol mientras que el plan de Liverpool era esperar atrás para encarrilar contragolpes peligrosos de la mano de Puglia y Aguirre. En una de esas contras Ravecca trepó por el sector derecho y se perdió el tercero, solo una vuelta de reloj después nació la esperanza del visitante en un tiro de esquina de Liverpool donde Wanderers elaboró una gran contra de la mano de Albarracín que con su pierna izquierda envió un pase a la espalda de Ravecca que le dejó todo de cara al chapita Sergio Blanco que no perdonó y achicó distancias el goleador del equipo del Prado que hasta el momento no había tenido su mejor partido.

A partir de ahí Wanderers se lo creyó y fue con todo el empuje para arriba en busca del empate, Liverpool en estado de shock vio como su rival solo 2 minutos después mandaba una pelota en el palo, el juvenil Ramírez casi debuta con gol, luego Santos también estuvo cerca de igualar pero intervino bien De Amores, el mejor de su equipo en el sector final del encuentro, un Liverpool que vio que con fútbol no podía y empezaba a perder tiempo como mucha picardía con jugadores como Aguirre y De Amores acalambrados en el verde.

A solo 5 minutos del final del tiempo reglamentario otra vez Kevin Ramírez se encontró con el palo, otro infortunio para el atacante visitante y la parcialidad visitante no se lo podía creer, su equipo ya merecía al menos el empate por buscar el gol a la desesperada pero siempre manteniendo su estilo de jugar por abajo tratando bien a la pelota en un terreno de juego en muy buenas condiciones, Santiago Martínez como siempre era el encargado del juego sucio y a partir de ahí el equipo era muy ofensivo.

Se veía venir el empate, Blanco tuvo 2 ocasiones en 2 minutos, en la primera tapó bien De Amores y en la segunda cerró justo Caué Fernándes, el árbitro Fedorczuk añadió 5 minutos de recupero en el cual el negriazul seguía perdiendo tiempo por lo cual hubo un sexto minuto adicional que fue mortífero para el locatario, en la última jugada del cotejo un centro de Albarracín encontró la cabeza de Bueno que le da una buena alegría a su hinchada al mandar el testarazo a la red. Final del partido y empate que ajusticia más a lo visto en Belvedere, aunque para Wanderers es casi un triunfo estirando a 10 los partidos consecutivos sin conocer la derrota, para Liverpool fue una linda oportunidad perdida de dormir líder provisional junto a Fénix.

Estadísticas del partido: