La academia de Sayago llegaba tras la heroica remontada de la fecha anterior ante Danubio. En cambio, los de la villa llegaban de caer vapuleados por 3-0 ante Peñarol

El primer tiempo fue de gran dominio para los de Larriera, que pese a no encontrar del todo las conexiones entre Nicollini y los de arriba, sí se hacían con las ocasiones de gol más claras. Y así llegó el primero, con un centro al área que remataba con potencia Zabala y que, con complicidad de Cubero, se metía en el arco. 

El segundo cayó sobre el final de la primera parte; gran recuperación de Dudok en la mitad de la cancha, para seguir la jugada con Tabó y recibirla nuevamente, definiendo en el área chica para marcar el primer gol de su carrera.

La segunda mitad arrancó con la rebeldía del conjunto cerrense, que lograba descontar de la mano de Silvera tras una gran asistencia de Regueiro. A partir de ahí se ponía parejo el encuentro, con los de Pablo Rodríguez jugados a buscar el empate y los racinguistas contragolpeando. 

Tras varios avisos de los villeros, un contragolpe cervecero liderado por Tabó finalizaba con la pelota estrellándose en el palo izquierdo de Cubero. Nuevo aviso de lo que luego llegaría. 

El DT local, buscando apaciguar el peligro que generaba la visita, optó por sacar dos atacantes, Zabala y Fernández, para dar ingreso a dos jugadores de corte defensivo, Pablo Lacoste y Carlos Díaz. A su vez, renovaba la ofensiva dando ingreso a Gutiérrez por Juan Pablo Rodríguez.

Sobre el final, en una gran jugada personal, Tabó elude a dos defensas cerrenses y define contra el palo, liquidando el partido. Minutos después, y para cerrar con broche de oro el duelo matutino, Aguilar anotaba el cuarto a los 90'.