El Barcelona B jugó un partido amistoso ante la selección de Indonesia sub-19 en donde los catalanes aprovecharon para darle minutos a Luis Suárez que viene cumpliendo su tan discutida sanción de la FIFA.

El salteño acaparó todos los focos y eso que no era el único jugador que reforzó al filial azulgrana, ya que el belga Thomas Vermaelen en plena recuperación física tuvo minutos en el equipo que milita en la categoría de plata del fútbol español y que cuenta como cracks de futuro como el crata Alen Halilovic.

Suárez anotó dos goles pero lo que más resaltó a la vista fue un marcado sobrepeso que le hacía un poco más lento en los regates y en la presión en la salida de balón del rival, algo que trabaja mucho Luis Enrique, el cambio físico era notorio comparando con su aspecto en el mundial de Brasil.

Los medios españoles hicieron eco de ello y generaron un debate justo a falta de un mes para que Luis vuelva a las canchas de manera oficial que podría ser nada más que nada menos que ante el Real Madrid.

El delantero charrúa llevará un plan especial para llegar a tope en este último mes ya que el tan comentado sobrepeso sin dudas es por la falta de alta competición debido a su suspensión.

Entre tanto revuelo mediático apareció su entrenador, Luis Enrique, que el viernes en conferencia de prensa dijo lo siguiente al respecto: “Es un cuerpo de élite, si quieren le hacemos una liposucción pero no es el caso".

Con esa ironía no acabaron sus declaraciones, el asturiano también dijo: “Son chascarillos que salen y van a acompañarnos eternamente. Es un jugador de corpulencia. En el Liverpool nunca le vi chupadito ni fino. Tiene un físico potente, está para competir, sin duda”.

En el seno del club azulgrana confían en su recuperación y ven de forma positiva la citación de Suárez para disputar los amistosos que disputará la selección uruguaya en octubre ante Arabia Saudí y Omán donde el salteño podrá alcanzar su forma óptima y tampoco descartan que forme parte de algún amistoso más con el segundo equipo del club.