Comenzaba el futbol nacional. El Deportivo Lara tenía la oportunidad de abrir el torneo en casa ante un rival accesible en el papel, el Deportivo JBL. Una oportunidad perfecta para iniciar con el pie derecho y así fue. Precisamente de la derecha de Darwin Gómez, los larenses se llevaron la victoria en la tarde-noche del sábado.

El partido tuvo lugar a las 17:00 horas en el Estadio Metropolitano de Cabudare. Ambas oncenas salieron desde el pitazo inicial buscando el control de la esférica y  así dominar el encuentro. Sin embargo, fueron los locales quienes se hicieron con la pelota más tiempo.

La máquina de Leo González 

La idea de los rojinegros era clara, buscando asociaciones en ataque por ambas bandas; siendo el sector derecho el más utilizado. En los primeros minutos, Darwin Gómez, quien actuó como extremo derecho para los larenses, tuvo mucha participación. El 10 de Lara, se encargaba de recibir el balón y tras superar a su rival, Christian Ramírez (lateral izquierdo de JBL los primeros 45’), buscaba asistir a sus compañeros desde la línea de fondo.

En el minuto 10’, llegó el primer remate del encuentro gracias a Joel Infante. Tras un disparo de pierna izquierda que se fue desviado por encima de la red. Luego, tan solo 6 minutos después, llegaría la opción más clara de la primera mitad. Gómez, desde la derecha daba un servicio a media altura que Winston Azuaje, en el área chica, no podría conectar bien y se iría por encima del arco rival.

El Deportivo Lara se mostraba superior. Los pocos ataques de los zulianos, eran cortados por los centrales del equipo local, Leonardo Aponte y Gabriel Cichero, quienes tuvieron un partido excepcional.

Continuaba la primera parte y tras un partido disputado en la mitad de la cancha, los rojinegros eran quienes controlaban los tiempos del encuentro. Al minuto 31’, Jesús Hernández lo intentaba con un tiro desde las afueras del área, el cual detendría el arquero Semidey.

Se terminaría el primer tiempo sin ocasiones claras, exceptuando la llegada de Azuaje. El Deportivo JBL se veía dominado, pero atentos a la recuperación del balón y sorprender con una contra, la cual nunca se efectuó con éxito.

El partido de reanudaría y los del Zulia harían su primera modificación. El juvenil Ramírez saldría y en su lugar entraría José Peláez, también juvenil. En los primeros minutos de la segunda mitad, los visitantes se mostraban mejores; trataban de tener más el balón y buscaban crear ocasiones de peligro. Uno de sus delanteros, Edgar Rito, aparecía múltiples veces pivoteando de espalda al arco para que el balón siguiera en circulación de los suyos.

Las sustituciones jugaron un papel clave 

Cuando parecía el mejor momento de la visita, los dirigidos por Leo González efectuarían su primer cambio. En el minuto 56’ saldría Alexis Ramos y entraría Heiber Díaz. Un volante que ofrece recuperación y salida, por un delantero de área. Las intenciones estaban claras.

Todo le saldría de maravilla a González, cuando tan solo 3 minutos después del cambio, el gol rojinegro llegaría. Al minuto 59’, una jugada extraordinaria de Hernández por banda izquierda, acabaría en un servicio para Gómez que de pierna derecha en el área, la finalizaría en gol.

Posterior al gol, 7 minutos después, saldría Joel Infante y entraría Ricardo Andreutti. Un extremo, por un volante. Al parecer el objetivo ya estaba cumplido. Ya en los últimos minutos el partido fue de a poco dominado por el Deportivo JBL. Los larenses se encerraron en su área buscando "matar" el partido en la contra, las cuales desperdiciaron en varias ocasiones.

Edgar Rito y Richard Celis, los delanteros de la visita, lo intentaron en diversas oportunidades para su equipo pero se encontraron con el guardameta Luis Curiel de buena actuación bajo los tres palos.

De tal manera, el Deportivo Lara conseguiría los primeros tres puntos del Torneo Apertura 2017. Con grandes actuaciones de Cichero, Aponte y el juvenil Anzola en defensa dejarían el arco en cero. También caben destacar las presentaciones de Bernaldo Manzano y Alexis Ramos con el club en la medular y el juego desequilibrante del goleador Darwin Gómez.