La selección venezolana Sub-20 tiene cada vez menos margen de error de cara a la soñada clasificación al Mundial de Corea del Sur. Los empates abundan dentro de los resultados y parecen ser cada vez más dependientes de arranques individuales para realizar anotaciones.

El enfrentamiento ante Colombia fue el partido más cercano a una victoria desde el resultado pero el más alejado desde el desarrollo. La Vinotinto entregó la iniciativa con el partido a favor desde resultado y en la cantidad de hombres en el campo (posterior a la expulsión de Cuesta),  lo que concluyó con una Colombia en inferioridad de jugadores pero con superioridad de campo disponible para moverse mientras que Venezuela pasó a un 4-3-3 con la entrada de Ruíz por Romero y decidió resguardarse cerca de Fariñez. El empate más doloroso para los nuestros en un momento delicado de la competencia tapado por el error arbitral que le otorgó a Colombia en la vía del penal pero, no nos olvidemos de que decidimos suicidarnos cuando podíamos sentenciarlo.

El acompañante de Yangel Herrera

El reciente fichaje del grupo del Manchester City,  Yangel Herrera, es la pieza fundamental de la selección cuando llega la hora de las transiciones ofensivas combinadas,  obviando a Soteldo que él lo hace por sí solo, lo que determina que su posición en el campo debe recibir mayores libertades defensivas otorgadas por un volante de contención posicional cuando él se transforma en un volante ofensivo.

La inclusión de Luis Ruíz contra Colombia para pasar a un 4-3-3 no parecía una idea tan descabellada desde el planteamiento propiamente dicho,  debido a que con Ruiz y Lucena en posiciones de 5 y 8,  Yangel podía surgir como un 10 libre para combinarse con Córdova, Soteldo y Ronaldo Peña. Además de aportar más en la presión alta a los circuitos de juego rival.

No olvidar las formas

Pese a los empates, el equipo de Dudamel no ha mostrado un mal desempeño dentro del sudamericano en Ecuador. Un equipo dinámico pero escaso de eficacia de cara al arco rival pero mostrando superioridad en el desarrollo de los 4 partidos previos al hexagonal. Contra Colombia, tener la victoria tan cerca fue un estimulo negativo para el equipo que, termino muy junto a su portería teniendo el contexto favorable para sentenciarlo. Atacar para defender y no sufrir.

Los esquemas tácticos no  son los que determinan los comportamientos colectivos, sino las características individuales de los jugadores que hacen vida en la posición del campo. Los resultados llegaran si el equipo mantiene los métodos utilizados en la fase ya que, la escasa contundencia no es una causalidad, sino una casualidad. Peña y Romero solo tienen que sacarse la mala racha.

Los retrocesos defensivos

Ante el combinado ecuatoriano,  el desgaste físico que generará el contexto en donde se realiza el partido obligará al combinado nacional preocuparse en las transiciones ofensivas del rival donde puede hacer mucho daño Bryan Cabezas y Estupiñan por la banda derecha. La importancia de los movimientos defensivos de los jugadores por la banda izquierda (Quero y Soteldo) será vital para no sufrir cuando el partido pase a ser golpe por golpe,  instancia donde el conjunto dirigido por el ecuatoriano Javier Rodríguez, sabe manejar a la perfección.

Referencias los puntos clave de los contragolpes con marcas personales en ataque,  obstruyéndole la oportunidad de recibir y obtener el perfil idóneo para correr al espacio. El 2x1 por las bandas será importante,  lo que obligará a Soteldo y Córdova, de ser los elegidos de las bandas, bajar a realizar marcajes de apoyo.

El posicionamiento del mediocampista de la primera línea que acompañe a Herrera es vital a la hora de anticipar los ataques directos ecuatorianos conjunto a la marca que debe realizarse mientras se ataque será trascendental para neutralizar los puntos fuertes de rival. La posición de Soteldo puede sufrir una metamorfosis, no desde el punto de partido, sino en la zona de acción donde se desplazara el 10 criollo.

Lucena puede aparecer por izquierda para quitarle responsabilidades defensivas a Soteldo.
Lucena puede aparecer por izquierda para quitarle responsabilidades defensivas a Soteldo.

Bryan Cabezas: El As de Espadas

El seleccionado ecuatoriano, al igual que en el de mayores, es un conjunto muy rápido en las transiciones con un juego directo rápido con mucho desdoble de los laterales,  sobre todo cuando ejerce de local en Quito,  donde el contexto les da una ventaja.

El arma principal del conjunto local es el mediocampista Bryan Cabezas,  una de las piezas fundamentales del Independiente del Valle que jugó la final de la Copa Libertadores 2016 contra Atlético Nacional de Colombia y, ahora forma parte del Atalanta de la Serie A de Italia.  El nacido en Quevedo es un jugador polivalente ofensivamente desde sus características individuales en conjunto a Pervis Estupiñan que le ofrece una compañía idónea para desbordar y hacer el 2x1 por la banda o para centralizar su posición y restarle responsabilidades defensivas. Un tándem complicado de detener.

La importancia de los duelos por las bandas. El juego pasa por quien logre encontrar a su mejor jugador con mayor ventaja en duelos individuales
La importancia de los duelos por las bandas. El juego pasa por quien logre encontrar a su mejor jugador con mayor ventaja en duelos individuales