El partido terminó siendo anecdótico. Las diferencias entre ambos equipos eran abismales y se demostraron en el verde césped del estadio mundialista de Daejeon. En un fútbol desastroso, los “chamos” surgen como los salvadores,  como unos héroes sin techo.

La “Mini Vinotinto” goleó sin ningún inconveniente a su similar de Vanuatu por 7-0 y certificó su clasificación a los Octavos de Final de la Copa del Mundo Sub-20.  En un partido sensacional donde nadie desentonó,  Venezuela le dice al mundo que es una de las candidatas a pelear por el titulo y que, poco a poco, dejamos de ser un simple “aficionado” en el mundo del fútbol.

Rafael Dudamel lo tenía claro desde lo táctico. El rival demostraba muchas debilidades dentro del área más que por las bandas o el medio sector del campo aunado a las molestias físicas de Yeferson Soteldo,  la entrada de Ronaldo Chacón parecía lógica desde el comienzo. Pasamos del 4-2-3-1 a un 4-4-2 para prevalecer el juego por las bandas y poner a dos delanteros que se enfrentaran mano a mano con los defensores de Vanuatu, que han demostrado estar a un nivel muy lejano del regular.

Dominio criollo

En los primeros minutos, Venezuela dominó a placer el partido generando muchas oportunidades de gol,  con la misión de anotar el primer gol lo más rápido posible para no sufrir en el desarrollo del partido. Ronaldo Peña tuvo la primera, en el minuto 1, después de un gran centro de Sergio Córdova desde la banda derecha. Poco a poco, el partido parecía convertirse en un trámite para los criollos.

Pero comenzó a predominar el desorden y la ansiedad en los criollos, que utilizaron en demasía los balones largos para hacer daño al darse cuenta que por abajo se les estaba haciendo complicado entrar en la defensa poblada de los oceánicos. Hasta que, un genialidad y viveza de Lucena abrió el partido. La combinación de Lucena, Peñaranda y Velázquez terminarían anotando el 1-0.

Solo 10 minutos después, aparecería Córdova para anotar el 2-0 de cabeza y el partido comenzaba a sonreírle a Venezuela ante un rival que nunca inquietó a Wuilker Fariñez,  un espectador de lujo dentro de la cancha.

Festival de goles

Sin oposición, los criollos comenzaron a destrozar rápidamente a Vanuatu, dejándolo sin oportunidades para remontar el marcador como hicieron contra México en la primera jornada del Mundial. Adalberto Peñaranda en un mano a mano anotaría el 3-0 con solo segundos en el reloj del según tiempo.  Wuilker Fariñez anotaría de penal con un disparo rasante el 4-0 y Vanuatu seguía siendo un sumiso de los criollos. Córdova en otro mano a mano, después de una gran asistencia de Lucena, anotaría el 5-0 y su tercer gol en el Mundial. Con Soteldo, todo cambio y el pequeño del Huachipato de Chile asistió a Jan Hurtado que anotaría el 6-0 en el área chica y para terminar la fiesta, Ronald Hernández desbordo y centro, Hurtado el dejo pasar como un crack para que Samuel Sosa la empujara y cerrará la cuenta. No era necesario seguir anotando goles

Con una nueva victoria, que nos trae a la cabeza recuerdos de la goleada a Tahiti en 2009 con Salomón Rondón como líder y César Farías como entrenador, Venezuela consigue convertirse en el primer equipo clasificado a la siguiente ronda del Mundial y, con muchas posibilidades, de terminar primero en el Grupo B y tener un rival más sencillo en la siguiente ronda. Con un resultado más beisbolitico o de futbol sala, la Vinotinto deja las cosas claras: No fueron a pasear en Corea y quieren regresar con la copa en manos.