Después de una importante victoria ante el combinado nipón en tiempo extra gracias a un gol del capitán de la selección Sub-20, Yangel Herrera, a Venezuela le tocará enfrentarse este domingo a su similar de Estados Unidos por los cuartos de final de la Copa del Mundo FIFA Sub20 Corea 2017. Esta selección ha demostrado tener una buena condición física para aguantar la exigencia de cada partido que se les ha presentado, ejemplo claro el partido contra Japón, y eso Joseph Cañas lo resalta, el preparado físico de la selección nacional dio declaraciones al departamento de prensa del equipo sobre el rendimiento que ha tenido el combinado patrio en este mundial. “En parte te da la tranquilidad de poder estar tranquilo con respecto a lo que se planifica, lo que se desarrolla con respecto al trabajo, no solamente físico, sino técnico, táctico, estratégico, emocional, mental. No solamente corren todo el tiempo que sea necesario, sino que también estar concentrado todo ese tiempo y desarrollar las tareas tácticas que normalmente les solicita el cuerpo técnico a los jugadores”, comentó.

“Estamos tranquilos, porque se ha cumplido con toda la planificación, han sido más de 310 sesiones de entrenamientos previo al Mundial, fueron aproximadamente 750 horas de trabajo que llevaron encima estos muchachos para poder afrontar los partidos, no solamente del Mundial, sino del Sudamericano. Al igual que fueron 46 partidos internacionales que durante toda la preparación los muchachos se desplegaron al máximo y sumaron experiencia internacional, que es lo que tanto nos hace falta en estas categorías formativas”, agregó.

Cañas destacó la importancia de la preparación que tuvieron en la altura por entrenar a más de 2600 metros sobre el nivel del mar para poder afrontar de la mejor manera el Sudamericano.

“Planificar un Sudamericano, una jornada tan maratónica como siempre lo he dicho, es totalmente diferente a un Mundial. La ventaja fue que tuvimos seis semanas de preparación en la altura, por arriba de 2600 metros sobre el nivel del mar para el Sudamericano y después quedó una base de trabajo, que no solamente es de manera cardio-respiratoria, sino también es muscular; los jugadores aumentaron su masa muscular para soportar lo que era el Campeonato Sudamericano, nueve partidos en 21 días, pero ya el Mundial es otra tónica”, argumentó.

Joseph se siente satisfecho por la actitud que tienen los jugadores por dar lo mejor de sí en esta Copa del Mundo “Se creó esa base durante toda la preparación, los jugadores asimilaron notablemente las cargas de trabajo y solamente hicimos unos toques con algunos jugadores específicos para que llegaran de la mejor forma física que se pudiera al torneo, que es corto, de tres partidos para pasar a una siguiente fase, donde la parte de recuperación es sumamente importante y la parte alimentaria también juega un papel fundamental. Es una sumatoria de variables que nos permite avanzar de fase, físicamente han respondido, inclusive al alargue que tuvimos mostrando una solidez física, mental, deportiva, táctica, que nos permitió soportar el partido, tener la tranquilidad de saber que en cualquier momento anotábamos y la madurez deportiva para lograr reponernos a las adversidades que tuvimos durante el transcurrir de los octavos de final”, acotó.

El preparador de la selección nacional también destacó la importancia de viajar hacia el exterior para continuar con su preparación.“Es fundamental, nos dimos cuenta cuando asistimos a una de las competencias internacionales, en el COTIF, que el fútbol menor venezolano, las categorías formativas en Venezuela, tienen muchas deficiencias, para nadie es un secreto. Nosotros tratamos con nuestra metodología de trabajo combatir esas deficiencias desde el punto de vista técnico-táctico que tienen nuestros jugadores con el despliegue físico y el desarrollo muscular que puedan tener nuestros atletas comparándolas con otras selecciones, sobre todo en Europa”, aseveró

“Tratamos siempre de desarrollar y potenciar todas las cualidades del jugador, obviamente unos más que otros. La metodología que utilizamos con la selección sub-17 de Venezuela que clasificó por primera vez a la Copa del Mundo en Emiratos Árabes Unidos, lo que hicimos fue retocarla, potenciarla y desarrollarla de mejor manera para esta sub-20, puesto que teníamos una gran limitante, ir a jugar por arriba de 2600 metros sobre el nivel del mar”, prosiguió.

Cañas también se refirió a que el fuerte de la selección nacional es su potencial físico. “Tratamos de perfeccionar nuestra metodología, desarrollarla al máximo y contamos con un grupo de jugadores, que tienen una característica fundamental a diferencia de otras selecciones que hemos llevado en categorías menores, como lo es un grupo muy competitivo, con hambre de crecer y ganar que no las he encontrado en otras selecciones que hemos manejado. Son aspectos que siempre suman, que siempre nos llevan a querer superarnos, de ir de menos a más y los muchachos saben que su fuerte es el potencial físico, tenemos un buen biotipo para las posiciones específicas y le sacamos provecho a nuestras cualidades más que a nuestras dificultades”, indicó.

 

“El plan de trabajo del jugador como tal lo desarrollamos primero en las sesiones de entrenamientos que llevábamos a cabo durante los módulos de trabajo. Hubo casos específicos en los que nos tocó enviar por internet algún material para que los jugadores se pusieran a tono en la preparación o cuando no pudieron estar en lo que son las secuencias de trabajo; se cumplieron al igual que las sesiones de gimnasio cuando están en sus clubes con una buena comunicación con los preparadores físicos, los mismos jugadores con los cuerpos técnicos, buscábamos siempre que el jugador estuviera yendo constantemente al gimnasio y nos damos cuenta acá en el Mundial, donde el biotipo juega un papel fundamental e importante, porque las selecciones que van pasando de ronda tienen una característica primordial, que es que la gran mayoría de sus jugadores tienen una buena talla y un buen desarrollo atlético que les permite competir más allá de sus cualidades técnicas, competir al más alto nivel en esta cita mundialista”, argumentó el profesional de la preparación física.

Para conluir el preparador alabó la constancia que tuvo todo el cuerpo técnico desde que empezaron con el primer entrenamiento el 31 de agosto de 2015 y que gracias a ello "les permite gozar ahora de lo bien que se prepararon..." 

“La preparación del Sudamericano, esas seis semanas en la altura, les creó una base física a estos jugadores, que les permite tener, como decimos coloquialmente, gasolina para responder cuando tengan que poner el pie en el acelerador. Para mí es fundamental el comportamiento y el trabajo que llevaron a cabo los jugadores durante toda la preparación, porque les permite gozar ahora de lo bien que se prepararon previo al Sudamericano y previo al Mundial; es un grupo muy consciente que entiende la magnitud de lo que nos estamos jugando nosotros acá en el Mundial y más allá del trabajo físico, es de admirar el trabajo de los jugadores, la entrega que han tenido durante toda la cita mundialista, las ganas y el ímpetu que tienen, la madurez que han mostrado y lo competitivo que son, es de resaltar esa gran cualidad que no todos los grupos lo tienen y que este tiene la virtud que nosotros le estamos sacando provecho de ser competitivos y querer siempre ir a más”, finalizó. 

VAVEL Logo
Sobre el autor
Isidro José  Romero Bottini
Estudiante de Comunicación Social.