Después de poco más de 450 apariciones al bat, el poderoso beisbolista de los Diablos Rojos del México, Japhet Amador, logró conseguir su hit número 700 dentro de la Liga Mexicana de Béisbol (LMB), algo que lo llena de satisfacción, así lo indicó el primera base al término del encuentro frente a los Sultanes de Monterrey.

Estoy muy contento, no tenía idea de que estaba cerca de alcanzar esta cifra. Estaba concentrado en el juego, gracias a Dios, llegué a esta cifra y me siento muy contento de alcanzar un objetivo como éste”.

El cañero quien debutó a los 20 años en el béisbol profesional de nuestro país con los Mineros de Minatitlán, aceptó que cada vez que se para en la caja de bateo lo hace pensando en ayudar al equipo y no en conseguir números personales.

Es algo que viene solo. Uno está aquí para buscar campeonatos y ayudar al equipo, ganar juegos, no buscamos metas personales, si se dan, damos gracias a Dios, pero estamos para ganar como equipo y así jugamos, buscando victorias que es lo que nos importa”. 

El nacido Mulege, Baja California Sur en 1987, detalló que seguirá trabajando como lo ha hecho, pues confía en que los Diablos tienen la capacidad de lograr el bicampeonato dentro de la LMB.

Uno trata de jugar día a día, de ayudar al equipo, que es lo que el manager espera de nosotros, si vienen los hits y vienen los batazos vamos a seguir peleando”.