Cuando Roberto García Orozco pitó el final de los Cuartos de Final de vuelta entre América y Pumas en el Estadio Azteca, muchos aficionados se quedaron con las ganas de ver un poco más de Universidad. Los unamitas se quedaron a unos pasos de la gloria, dejando con un nudo en la garganta a sus fieles seguidores. 

Desde que llegó Guillermo Vázquez por segunda ocasión al banquillo auriazul, los del Pedregal sólo perdieron dos juegos de 14 en el Apertura 2014 y se consolidaron como el mejor visitante de la Liga; sin embargo, la poca productividad como local fue factor para que al final quedaron eliminados a manos del odiado rival. 

Las condiciones en las que Pumas arranca el 2015 son muy diferentes a las del semestre pasado. Ahora, los universitarios tienen un proyecto sólido, con directivos que cumplen su palabra y un estratega que conoce de pies a cabeza la institución felina

Una de las primeras consignas de Antonio Sancho y compañía para este torneo fue bajar la edad promedio del plantel, así como también el número de extranjeros y brindar oportunidades a los jóvenes de la cantera. De principio, estos tres objetivos se han cumplido. Además, Pumas apuntaló zonas específicas del campo para pelar en los primeros puestos. 

Esos muchachos que apenas comienzan su camino en el profesionalismo serán los encargados de jugar la Copa MX y regresarle al club la mística y tradición que muchos dicen se ha perdido con el paso de los años. 

El próximo domingo, Pumas enfrentará la primera cita imporante del torneo, lo hará ante su gente en Ciudad Universitaria, donde tendrá que demostrar que cosas grandes pueden pasar.