El Puebla FC ya se puso la soga al cuello y, tras desperdiciar una ventaja en el marcador por tercer partido consecutivo, se ha distanciado a ocho puntos de su único rival directo con cociente equiparable –Guadalajara– y ahora solo le quedará esperar el desempeño futuro de UDG, a quien le bastan 10 puntos más para salvarse matemáticamente del descenso.

El partido ante la UNAM del domingo pasado en el Olímpico de CU, se perdió al no aprovechar varias jugadas claras de gol y con dos balones parados en contra. Al respecto, Luis Robles, defensa que entró al campo de juego apenas a 15 minutos de iniciar el encuentro por la lesión de Efraín Cortés, atañe el resultado a la incapacidad poblana frente al marco, diametralmente opuesta a la certeza universitaria: “Nos faltó contundencia, generamos bastantes llegadas y no las pudimos meter. Ellos tuvieron dos y las aprovecharon”.

Con respecto a la recta final del torneo, al que aún le restan seis encuentros por disputar, el ‘Macue’ reconoce desconfianza, pero es consciente de que nada puede evitar que se salgan a morir en la raya para obtener la mayor cantidad de puntos posibles.

“Queda un poco de desconfianza con respecto a la situación del cociente. Aun así, sabemos que hay más partidos para remontar y darle vuelta a la hoja para pensar en lo siguiente. Quedan muchos partidos más y cada uno de ellos lo tenemos que ganar sí o sí. Cada partido representa una final y tenemos que salir a demostrarlo”.