Pese a que su aventura como director técnico de América culminó año y medio antes, Gustavo Matosas aprovechó su última conferencia de prensa en las instalaciones de Coapa para agradecer a las personas que lo llevaron a dirigir a uno de los mejores equipos de México, así como también a sus pupilos y afición que en su mayoría lo respaldó.

Asimismo, el timonel coincidió con Ricardo Peláez que su salida de la institución crema se debió única y exclusivamente al hecho de tener diferencias en relación al diseño del equipo para el siguiente campeonato, por lo que se llegó a un común acuerdo de deslindarse.

"Muchas gracias por esta fantástica oportunidad de dirigir al América, gracias a toda la afición, a los jugadores que dejaron la piel en la cancha, al personal que trabaja acá. Agradecerle también a Pepe (Romano), a Yon de Luisa y sobre todo al dueño del equipo Emilio Azcárraga por la oportunidad. Es en los mejores términos (su salida), un común acuerdo para que América se quede sin técnico y yo me pueda ir. 

"Hemos tenido una relación muy cordial (con Peláez), esto para aclarar. Tenemos diferencias en el diseño del equipo, yo tengo una idea y para mi idea necesito jugadores de determinada velocidad y dinámica. América tiene desde hace tiempo un proyecto exitoso con el que van a seguir y a mi no me ha ido mal por mi lado", detalló.

El charrúa nunca dudó de la capacidad de su plantilla, sin embargo, mencionó que para llevar a cabo su filosofía de juego necesitaba a futbolistas con otras particularidades, elementos que la directiva azulcrema no pudo otorgarle.

"El equipo ganó la Concachampions, entramos a la Liguilla pero quedamos afuera por situaciones del juego; sigo pensando que era un gran plantel, lo que pasa que para desarrollar el estilo de juego que a mi me gusta, yo necesito algunos jugadores de otras características", indicó. 

A pesar de su corta estadía, Matosas parte del Nido con gratas sensaciones: "Con poder dirigir a una gran institución, en uno de los mejores estadios del mundo como lo es el Azteca. Voy a tratar de siempre quedarme con lo bueno, levantar una copa que te lleva al Mundial de Clubes no es tarea fácil; con el apoyo de la gente en los momentos difíciles y mucho agradecimiento con la gente de América", reconoció.

Por otro lado, el estratega sudamericano aceptó que en algunos lapsos no gozó de su permanencia en América. No obstante, ya mira hacia el futuro, mismo que le llena de ilusión y entusiasmo.

"Sí, dejé de disfrutar algunos momentos; no es fácil disfrutar en América. Estoy ilusionado porque seguiré con mi vida futbolística, sé que pueden venir cosas buenas. Dios tiene preparado un camino para cada uno; los cambios siempre generan entusiamo. Me voy muy tranquilo, contento de volver a casa", admitió.

Reiteró que su prioridad era fortalecer al plantel con jugadores que le posibilitaran echar a andar su propuesta futbolística, y el recibir una respuesta distinta por parte de la dirigencia hizo que tomara la decisión de hacerse a un lado, ya que para él es fundamental que su ideología se vea reflejada sobre la cancha.

"Esa fue la idea (incrementar la plantilla), pero también entiendo a la inteligencia deportiva, el diseño de los que llegan y de lo que se podrían haber ido. Yo no voy a renunciar a lo que quiero dentro de la cancha. Me gusta lo que hago pero necesito disfrutar. Es muy normal tener diferencias, la posición de Ricardo y la mia no quiere decir que uno tenga la razón, todas son respetables. Pudimos hablar y quedamos en buenos términos, eso es lo más satisfactorio", comentó.

Gustavo reveló que fue un deleite haber estado en el banquillo águila, aunque le hubiese gustado haberlo disfrutado más. Asimismo, descartó que desprenderse del club más ganador del balompié mexicano no fue algo complejo, pues como lo dijo semanas atrás, siempre tiene las maletas listas.

"Para mi fue un placer dirigir al América, hubiera querido disfrutarlo más, pero no cuestiono nada. Ambas partes estamos convencidas de esta decisión, por lo que no me cuesta nada (salir del club). La puerta aquí está muy grande para entrar y salir.

"El apoyo de los jugadores lo he sentido siempre, sobre todo después del partido contra Veracruz y no me cuesta desprenderme de América. Tengo clara la idea de lo que quiero y necesito disfrutar viendo jugar a mi equipo, eso para mi es primordial. Me voy con la espina de no haber ganado el campeonato (de Liga), no es fácil jugar con 10 hombres durante 60 minutos; el equipo pudo conventir tres goles. La idea era ganar la Liga y Concachampions", añadió.

Finalmente, el entrenador señaló: "Quería irme con todas las copas que el equipo jugara pero esta es la realidad y hay que aceptarla". Matosas Paidón asentó que le gustaría continuar dirigiendo en México.