En medio de una controversia por su gusto hacia el acérrimo rival, Carlos Salcedo llegó al Guadalajara. Las críticas y cuestionamientos de la afición rojiblanca no se hicieron esperar, sin embargo, el defensor se dedicó a trabajar para devolverle la confianza a la directiva y cuerpo técnico que habían depositado en su persona.

El Titán fue quizá la más grata revelación del Clausura 2015, puesto que arribó al futbol mexicano sin mucho cartel, dado que su primera experiencia en el balompié azteca había sido efímera, en el lejano 2011 con los Tigres.

Salcedo disputó 20 de los 21 encuentros totales que jugó el Rebaño durante el certamen, en todos ellos fue titular y solamente en un partido, específicamente en la Jornada 2 salió de cambio. Su colaboración en la zaga tapatía fue determinante para que Chivas tuviera una de las mejores tres defensivas de la fase regular, aprobando únicamente 16 goles. 

Su destacado semestre con la elástica chiva ha generado que clubes del Viejo Continente se hayan fijado en él. Asimismo que Miguel Herrera lo convocara para la Selección Mexicana que jugará la Copa América en los siguientes días.