Tras la victoria de Chivas sobre los Pumas de la UNAM, la afición se mostró más confiada que nunca, recuperaron la fe en el equipo que había estado fallando desde hace unos torneos atrás. Después de varios partidos de ver a un Chivas casi perdido, en esta ocasión se mostró a un equipo más fuerte y confiado. Con un resultado 4-0 favoreciendo a los rojiblancos, llegó una pequeña esperanza de soñar con la liguilla.

El Guadalajara logro dos triunfos consecutivos, uno contra Monterrey y el otro contra Pumas, esto ilusionó a la afición pensando en que podrían recuperar el alto nivel que tenían, por ejemplo, en la época del ‘Campeonísimo’ donde todo era triunfos y más triunfos. Si bien, la meta del ‘Rebaño Sagrado’ era salvarse del descenso, la idea de entrar a la liguilla no estaba desechada. Simplemente pasó a segundo plano al ser lo relevante la lucha contra el descenso.

Por otra parte, Matías Almeyda pidió que nadie despegue los pies de la tierra pues no es un hecho la completa mejora del plantel rojiblanco. Esto ya ha pasado anteriormente, surgen las ilusiones y en cuestión de partidos todo se va abajo. De momento, el objetivo principal ya se logró, al menos por esta vez, Chivas no va a descender. Todo indica que por el contrario, serán los Dorados de Sinaloa quienes regresen a la Liga de Ascenso MX.

Solo es cuestión de esperar los próximos partidos del ‘Rebaño Sagrado’ donde luchará por su lugar en la liguilla. Los próximos rivales del equipo dirigido por Almeyda son: Puebla, Atlas, Pachuca, Dorados y Santos. No parecen ser problema para los rojiblancos que ya vienen con una actitud ganadora.

Y eso no es todo, Chivas como vigente Campeón de la Copa MX jugará la SuperCopa en el próximo verano. Es ahí donde nace la oportunidad de llevarse una victoria más, otro título que les ayudaría a terminar de reforzar ese vínculo de confianza con la afición. Este equipo puede sorprendernos en el próximo Torneo Apertura 2016.