Con un pletórico marco como lo es el NRG Stadium, la Selección Mexicana se disputó con Venezuela el liderato del Grupo C en un encuentro que lucía interesante para ver el funcionamiento tricolor en una situación de menor presión, aunque no importancia.

A falta de una hora la libreta de Osorio nombró al siguiente once: 

El primer 4-3-3 fijo en la Copa América Centenario dejando de lado el flexible dibujo 3-4-3 que usó en los dos partidos anteriores. Como ya acostumbró el entrenador colombiano, sus rotaciones fueron Corona en la portería, Aguilar y Torres Nilo en las bandas, Molina de contención y Oribe como hombre de área.

Alineación de Venezuela (4-4-2)
Alineación de Venezuela (4-4-2)

Con el cronómetro marcando el noveno minuto, una espectacular tijera de José Manuel Velázquez colocó a la Vinotinto al frente del marcador. 

Las indicaciones desde el banquillo no indicaron cambios en la idea o estructura del juego tricolor. Ofender por las bandas en las figuras de Aquino y Lozano; con Molina mordiendo a Venezuela y Guardado como generador del primer toque para abrir la cancha. No obstante, el terreno de juego del NRG Stadium cobró su primer víctima: Aquino salió cojeando al minuto 16'.

Jesús Manuel Corona fue el elegido para ocupar el espacio en la banda izquierda. Con esto, el porcentaje de las jugadas por la banda izquierda comenzaría a incrementar. Por ejemplo, al minuto 33', Torres Nilo ingresó a velocidad por izquierda, a pase de Tecatito, para poner un balón en el área; el empate parecía cerca.

El primer tiempo llegó a su final y las interacciones que el entrenador Juan Carlos Osorio había insistido en buscar con su elección de jugadores no estaba redituando en lo que se esperaba. La salida con balón resultó intrascendente y el apoyo por las bandas no desencadenó en buenas decisiones. 

Para comenzar la parte complementaria, Layún ingresó por primera vez en este certamen como lateral por izquierda en lugar de Torres Nilo. Minutos después, la pierna derecha Velázquez bloqueó milagrosamente la jugada más clara del Tri.

Sin embargo, a partir de ese momento el funcionamiento comenzó a menguar. México tenía la pelota y daba muestras de querer, mas no de poder. Con Molina clavado prácticamente como un quinto central al momento que Venezuela acechaba la portería de Corona, las posibilidades de México eran responsabilidad de los interiores, es decir, Guardado y Herrera. 

Con la necesidad de anotar, Osorio sacó a Molina por el tan ansiado, por el público, Javier Hernández.

Se mutó a un 4-1-3-2 y la estafeta del medio campo pasó a pies de Guardado. La interacción Corona-Layún era el termómetro de México; intensidad, encare y mucho regate. Al 79', y tras insistir en repetidas ocasiones, Tecatito demostró por qué es una pieza inamovible para Osorio. Tomó la pelota en tres cuartos del área y finiquitó el empate al estilo de Lionel Andrés.

Si el gol no era suficiente razón para entender que el hombre del momento era Jesús Corona, las indicaciones de Layún lo hicieron patente. La victoria pasaba por los pies del jugador del Porto. Un remate, un encare, una impresionante parada de Ángel.

México se apoderó del partido con el ingreso de Layún, que forzó a Venezuela a apostar por la marca exterior y facilitó los sprints de Corona hacia dentro. El último tercio de la parte complementaria se pintó de verde, pero la Divina Providencia no le sonrió al colombiano.

Sin duda alguna, en la libreta de Osorio habrá varios apuntes con la pluma roja para encarar los Cuartos de Final de la Copa América Centenario aunque seguramente también se encontrarán trazos azules. Encontrar que en 10 partidos se han conseguido 9 triunfos, 1 empate y recibido 2 goles no luce mal.

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Sobre el autor
Alan Núñez
Mexicano de nacimiento, poblano de corazón. Director General de VAVEL México. | The Big Apple. Editor-in-Chief of VAVEL USA.