Poco que agregar con respecto al desempeño general del Puebla en este inicio del torneo, cuando ser el equipo con el primer DT cesado del Clausura 2016 lo dice todo. Los resultados nunca llegaron, pero tampoco lo hizo el interés porque llegaran. Por alguna razón, la máxima virtud que se le veía al equipo dirigido por Ricardo Valiño el torneo pasado, que tenía que ver con el ímpetu y el interés de sacar los resultados aun cuando futbolísticamente los argumentos no eran tantos, para este nuevo torneo, se esfumó.

Valiño dejó muy mal parado al Puebla

Ver a Puebla comenzó a ser molesto. Y lo hizo, porque en la cancha se veía afectado una y otra vez por los mismos errores. Al ataque no dejó muestras de que hubiera algo más allá del talento individual. Y en defensa, jamás fue capaz de dar garantías, sobre todo cuando de balón parado se trató. Incluso, por si faltara algo, la mayoría de los refuerzos ni siquiera fueron capaces de debutar en Liga MX con Valiño al mando.

Más allá de la ilusión innata que puede generar un equipo cuando se es aficionado de él, con La Franja las ilusiones tendrán que esperar. Por el momento, el panorama luce muy sombrío. Puebla es el equipo que peor juega en México, su problema de descenso se incrementó desde que inició el nuevo campeonato y hasta en materia de calidad de refuerzos pone a dudar. El único ápice de esperanza, se encuentra en la llegada del nuevo entrenador; con José Cardozo, las cosas tendrán que esclarecerse.

Un histórico ‘enemigo’ del Puebla llega a dirigirlo

Uno de los jugadores que más daño le hizo a los Camoteros en su carrera como jugador, indudablemente fue José Saturnino Cardozo. Concluyendo el siglo pasado e iniciando éste, se sabía de antemano que jugar contra Toluca implicaba un riesgo muy latente de que Puebla fuera humillado. Toluca se encontraba en su clímax histórico y La Franja estaba viviendo su época más triste; combinación ideal para que uno de los futbolistas extranjeros que más respeto se ganó en la historia del fútbol mexicano se sirviera con la cuchara grande.

Si bien su etapa en los banquillos lejos está de ese nivel brutal que demostró en la canchas, con Querétaro y Toluca, Cardozo ya ha demostrado que tiene argumentos como para ser un DT que haga huesos viejos en la Liga MX. A Gallos Blancos lo llevó a una liguilla y a Toluca lo dejó en la antesala de la final por dos años consecutivos.

No obstante, en Chiapas no le fue bien y es ahí donde surgen las dudas. El plantel con el que cuenta Puebla, parece asemejarse más al que el paraguayo tenía con los chiapanecos, que al que tenía con los queretanos o toluqueños. Por lo mismo, dirigir a La Franja tendrá que ser su prueba de fuego, que demuestre que puede trabajar con lo que le pongan.

Cardozo llega al Puebla a iniciar de ceros

Insistiendo en lo comentado antes, no es como que Cardozo llegue a un equipo que ya cuenta con cierta idea, ya tiene definido su once inicial o ya sabe quién será el encargado de cubrir con mayor calidad tal o cual posición. No, llega a un equipo en ceros. Y, lograr algo a partir de ahí, mucho mérito tendrá.

Es ganarle a Atlas, sea como sea

La situación, por lo pronto, no tiene marcha atrás. Puebla quedó a deber en cada uno de los cuatro juegos que jugó. En ninguno dio muestras de algo y las consecuencias ya quedaron plasmadas. Y si bien es cierto que eso no es culpa de Cardozo, el nuevo DT viene para dar soluciones y, de entre ellas, buscar ganar a como dé lugar debería ser un buen primer paso.

¿Se esperaría ver una idea de juego sólida contra Atlas? No. Cuesta trabajo pensar que en un lapso de tres días el equipo cambie tan dramáticamente la cara futbolísticamente hablando como lo tendría que hacer, considerando lo poquito que demostró con Valiño. Sin embargo, este tipo de partidos suelen ganarse con un toque de motivación, de devolver el hambre de triunfo al jugador.

José tuvo que llegar con el plantel camotero para convencer a sus jugadores, que muy probablemente en materia de ánimo no estaban bien, de que son valiosos, de que pueden levantar esto y de que pueden llegar a buen rumbo con trabajo y actitud. Justamente, ver ese ánimo y esa actitud en la cancha este viernes, sería ver un avance.

A Puebla le suele ir bien contra Atlas

Y, por si fuera poco, Puebla tendrá la ‘suerte’ de enfrentarse probablemente al equipo más óptimo para empezar con el pie derecho. Atlas está mostrando un fútbol muy bueno en su casa, pero fuera de ella lleva mucho tiempo sin dar nada. Hoy en día, es uno de los visitantes más flojos de todos y La Franja lo único que tiene que hacer es seguir sustentando esa situación. Mejor aún, considerando que el equipo rojinegro es uno de los pocos con los que los Camoteros pueden presumir jetatura reciente.

Quedaría esperar. A como empezaron las cosas con Puebla, de los siguientes nueve puntos, debería haber obligación de buscar los nueve. Aun así, todo a su tiempo. Por lo pronto, con certeza buscar estos primeros tres. Factible es. Siempre y cuando, la actitud comience a mejorar en el seno blanquiazul.