Ahora es jugador de Monterrey, hace algunos años de América, y antes de estar con las águilas vivió su sueño europeo al jugar con el Celtic de Escocia y con el Zaragoza de España. Sin embargo no se debe olvidar que antes de estar en todos esos estadios, países y equipos, Efraín Juárez jugó, y nació como futbolista, en los Pumas de la Universidad Nacional Autónoma de México.

El primer partido de Juárez en primera división se dio en la jornada 1 del torneo Apertura 2008 contra Necaxa. En aquel partido los Pumas ganaron dos goles por cero y fue titular. Durante toda esa campaña, Efraín jugó 17 encuentros, pero no metió ningún. De todos modos, este joven jugador se había convertido en pieza clave de los Pumas. Junto con Pablo Barrera, era uno de los prospectos más importantes que tenía el club universitario, y México, de cara al mundial.

Su último torneo con los auriazules fue el Bicentenario 2010: jugó 13 partidos y un total de 1170 minutos. Su historia con la playera felina había llegado a su fin porque después de un mundial destacado en Sudáfrica, los pretendientes europeos habían llegado. Pero no se fue con las manos vacías, ya que en el 2009 fue campeón del torneo Clausura con los felinos en una final que le ganaron a los tuzos del Pachuca.

La aventura del mexicano comenzó cuando el 17 de julio de 2010 se supo que Juárez jugaría para Celtic de Glasgow, en Escocia. Con ello, se convertía en el primer mexicano que jugaba en aquel país. Posteriormente se unió a la lista Gabriel Rojo de la Vega Piccolo, quien firmó con el Patrick Thistle; ahora el también ex Puma Eduardo Herrera y Carlos Peña forman parte de este selecto grupo pues Pedro Caixinha los pidió para ser parte del Rangers.

En un principio todo marchaba bien, comenzó como titular, e incluso marcó gol en la fase previa de Champions League, contra el Sporting de Braga de Portugal. Sin embargo su equipo fue eliminado así que la oportunidad estaba en la previa de Europa League, torneo en el que también anotó contra el Utrecht de Holanda.

Las cosas no podían ir mejor para un futbolista que tenía hambre de triunfar. Pero una lesión en un entrenamiento hizo que no solo perdiera actividad, sino también un puesto en el once titular, y eventualmente, el éxito en Europa. Al regresar del parón de juego, Efraín sólo disputó 12 juegos de la Liga Premier de Escocia con un total de 533 minutos. En la Copa de Escocia, torneo que su equipo ganó, sólo disputó un encuentro aunque lo hizo de titular.

Con un panorama poco alentador, Efraín cambió de aires y se fue a España para jugar con el Zaragoza que comandaba Javier Aguirre. Pero los problemas del equipo español lo obligaron a regresar a Escocia en enero de 2012 y para abril de ese año ya era campeón de la Liga sin haber disputado un solo minuto. América lo repatrió en ese mismo año y su destino no volvió a ser fuera del país.

Ahora juega en tierras del norte. Pero nunca se sabe que podría pasar con uno de los hombres de cantera que más han ilusionado en los últimos años. Quizá en un futuro vuelva a adueñarse de una banda mientras Pablo Barrera está en la otra, como en los viejos tiempos.