En la portería tenemos a José de Jesús Corona, el capitán que a pesar de lo que significa para la institución, el cancerbero ha podido hacer más en ciertos goles, aunque achacarle el mal paso del equipo sería injusto, pues sus compañeros no han ayudado demasiado.

Hablando de ellos, la defensa que tendría que ser la ayuda de Corona, se muestra lenta, descoordinada y sin un líder estilo Amaranto Perea, ésta línea es de las que más modificaciones ha tenido en todo el torneo, con todo y eso se siente una incertidumbre cuando el equipo rival ataca.

En el medio sector se encuentras inamovibles, o simplemente los que Caixhina viene decidiendo darles más minutos en el césped de juego. Como son el caso de los recién llegados; Carlos Peña y Montoya, al igual que Francisco Silva que llegó hace unos torneos, jugando muchos más minutos de los que su rendimiento mereciera;  equivoca muchos pases, no tiene distribución, y no ayuda demasiado a Rafael Baca, que desde su posible llamado a selección se nota titubeante, no le sentó bien los reflectores o simplemente se contagió del equipo. Las bandas han tenido destellos con Martín Rodríguez, Ángel Mena que supero rumores acerca de una mala relación con el técnico, el regreso de Edgar Méndez, Carlos Fierro que muestra más ganas que precisión, pero que no terminan por jugar un buen futbol.

La delantera parece no terminar de engancharse, si bien Felipe Mora y Martín Cauteruccio son buenos  delanteros, en mi opinión no hay un jugador desequilibrante que surta balones, y cuando llegan a tener una ocasión de gol, la contundencia brilla por su ausencia.