Después de más de 20 años de carrera, Rafael Márquez se despidió la noche del 21 de abril del 2018 como jugador profesional del Atlas en su casa: el Estadio Jalisco. Con un breve discurso y respondiendo unas cuantas preguntas, El Káiser se va para que su legado siga creciendo de generación en generación.

"Quiero agradecerles personalmente a la prensa que está presente y a la que no está, por todos estos años que han pasado. Con momentos buenos y malos, críticas con las que mejore bastante a lo largo de mi carrera. Solo me queda decirles gracias por el cariño y apoyo que he recibido. Gracias", nostálgico Rafael Márquez le dijo adiós a lo que fue su casa en el fútbol mexicano.

"Dejo un ejemplo para todos los jóvenes en Atlas"

Fue una despedida perfecta, victoria en el Clásico Tapatío y además un homenaje que pocos pueden presumir por parte de su afición. Rafa mencionó que será algo que nunca olvidar y este partido será imborrable en su memoria. Su objetivo de ser campeón no lo consiguió siendo jugador, pero ahora lo buscará en otra función dentro del equipo.

De su futuro en Atlas, aún no sabe a ciencia cierta que es lo que sucederá. "Trataré de buscar darle a esta gran afición y equipo ese título tan deseado. El presidente ha manifestado que tengo las puertas abiertas para tomar algún puesto. Tengo que pensarlo bien, tengo muchas ganas, pero hay que terminar bien el torneo", sentenció.

También habló acerca de su futuro inmediato de conseguir su último objetivo como jugador profesional: Jugar su quinto Mundial con México. "No todo es decisión de Juan Carlos (Osorio), también tiene que ver la parte administrativa. Estoy tratando de mantenerme en un buen nivel para pelear por un puesto en la selección", finalizó Márquez.