Una fría noche en la Angelópolis fue el escenario en el que se disputó el duelo correspondiente a la jornada 8 de la Liga MX entre el Club Puebla y Rayados de Monterrey en el estadio Cuauhtémoc.

En punto de las 21:00 horas, el ‘Cantante’ Fernando Guerrero hizo sonar su silbato y el esférico comenzó a rodar en la capital poblana. La visita buscó generar peligro desde el inicio y en par de ocasiones, hicieron sufrir a la zaga poblana que de una u otra manera, lograba ahuyentar el peligro de su meta. 

Puebla buscó generar peligro por las bandas, aunque sin inquietar al cuadro regiomontano, la única aproximación de la primera mitad terminó siendo un disparo del ‘Gringo’ Torres que controló sin mayor complicación Marcelo Barovero.

Fue al minuto 43, cuando Avilés Hurtado hizo una gran jugada individual y sirvió un gran pase filtrado para Luis Madrigal, que en el mano a mano ante Vikonis, terminó cruzando su disparo para vencer al cancerbero camotero.

Para el complemento, Enrique Meza quemó rápidamente sus modificaciones para dar ingreso a Acuña, Tabó y Espericueta, en busca de cambiarle la cara a una Franja que se mostró muy débil durante la primera parte. Tras un error en la salida de los poblanos, Rayados perdonó de manera increíble cuando Avilés Hurtado quedó solo frente al arco y en lugar de buscar definir, quiso dejar en el camino a Vikonis, sin embargo, el achique aunado a la falla evitaron el 2-0 para Monterrey.

Puebla reaccionó de manera inmediata y consiguió mandar el esférico al fondo de las redes tras una gran jugada y definición de Christian Tabó, pero para sorpresa de propios y ajenos, el silbante anuló la anotación argumentando, de manera errónea, que el balón había abandonado el campo en la jugada previa al gol.

Era el 68’ cuando Tabó repitió la dosis y tras una diagonal retrasada, puso el esférico razo y pegado al poste, lejos de toda posibilidad para Barovero, consiguiendo de esta manera la igualada. Tras el empate, el duelo se tornó ríspido y lleno de reclamos hacia el silbante por prácticamente cualquier jugada, lo que incluso derivó en la expulsión del estratega rayado, Diego Alonso.

El partido terminó con un cierre trepidante, de ida y vuelta, con ambos equipos volcados en busca de la victoria, y justo en el cierre del partido, cuando se jugaban los últimos instantes del cronómetro y tras varios desvíos dentro del área de la visita, apareció Lucas Cavallini para mandar el balón al fondo de las redes y conseguir una épica victoria para la Franja.