La década del 2000 siempre será recordada por los aficionados azulgranas, debido a que el equipo en los primeros años jugaba un fútbol ofensivo y vistoso para la tribuna, sin embargo, nunca pudo plasmarlo en algún título hasta que llegó el Apertura 2007 cuando el equipo emigró a Cancún para ser campeón ante los Pumas de la UNAM.

En dicha época, uno de los partidos más recordados aconteció en la serie de los cuartos de final del Apertura 2004 cuando los Potros de Hierro enfrentaron a los Diablos Rojos del Toluca en el final de su ‘época dorada’.

En aquella temporada, el Atlante inició con una dolorosa derrota de 7-0 ante Chivas en el debut del ‘Profe’ como estratega azulgrana, pero el club enderezó el camino y finalizó el torneo con 24 puntos en la séptima posición, por lo que le tocó enfrentarse al segundo lugar en la clasificación que eran los Diablos.

En el partido de ida acontecido en el Estadio Azteca, los choriceros se fueron al frente en dos ocasiones, pero el entonces equipo de la capital tuvo la capacidad de reaccionar en ambas ocasiones y al final con dobletes de Luis Rey y Sebastián González sacó la ventaja 4-2 tras los primeros 90 minutos.

Se apretó la eliminatoria

En el juego de vuelta en la Bombonera parecía que la eliminatoria quedaba definida al minuto 9 mediante el cobro de tiro libre directo de Luis Rey al colgarla del ángulo y adelantar al Atlante. Sin embargo los visitantes regalaron la pelota y, sobre la recta final del primer tiempo, el Toluca le dio la vuelta con el disparo de media distancia de Manuel de la Torre que fue desviado por un defensor y, posteriormente, con el rechace de Vilar en donde la terminó empujando Edgar Dueñas en jugada de tiro de esquina.

No obstante, Atlante no se quiso ir en desventaja al entretiempo y rápidamente tras una serie de rebotes, Diego Garay encontró el tanto del empate 2-2 para darle tranquilidad al potro.

En el segundo lapso Toluca comenzó a tambor batiente, por lo que Federico Vilar se proclamó héroe al sacar varios intentos que llevaban etiqueta de gol, aunque al 59’ no pudo evitar la anotación de José Cardozo, que volvió a meter al juego a los escarlatas.

El equipo de José Cruz no cambió su esquema futbolístico y tan sólo siete minutos después, a Sebastián González lo trastabillaron dentro del área en donde el silbante no dudó en marcar el penal. En dicho cobro, el delantero colombiano no falló e igualó el juego 3-3.

Los Potros en los últimos instantes dieron la estocada final mediante un contragolpe en donde el “chamagol” le dejó tres cuartos de gol al “canguro” para empalmarla con la suela del zapato y sentenciar un vibrante triunfo 4-3 en la vuelta y 8-5 en el global.

Aquí pueden revivir algunos fragmentos de aquel duelo:

Lamentablemente el Atlante se topó contra el Monterrey en semifinales y cayó en ambas juegos, por lo que no pudo avanzar a la gran final de ese certamen.