Santos Laguna no supo cómo abrir a la defensa ordenada de los Rayados y empató 1-1 en el estadio Corona para quedar eliminado de los Cuartos de Final del Apertura 2019 con marcador global de 6-3. Brian Lozano adelantó a los Guerreros, pero el visitante Vincent Hanssen anotó por Monterrey para adjudicarse el boleto a la ronda de semifinales y así acabar con cualquier intento de remontada santista.

La ventaja que obtuvieron los Rayados de 5-2 en el partido de ida le permitió a su entrenador Antonio Mohamed presentar en los siguientes 90 minutos un planteamiento conservador con el propósito de cuidar la ventaja. Mientras tanto, los dirigidos por Guillermo Almada salieron a su cancha con la encomienda de ganar por diferencia de tres goles.

El TSM fue el escenario que enfrentó a los equipos que clasificaron en las posiciones 1 y 8 de la competencia. Por ello, desde el protocolo de la Liga Mx se sintió una atmósfera de fiesta en las tribunas del inmueble que albergó a 25,642 aficionados. La presencia de confeti, humo verde y pirotecnia complementaron el fastuoso espectáculo visual.

Con el arranque del partido explotaron los canticos en favor del conjunto local y en abucheos hacia los blanquiazules, quienes a pesar de contar con el apoyo de su porra, se mostraron nerviosos en los primeros minutos en jugadas en las que erraron pases. Sin embargo, los santistas solamente se acercaron con disparos de media y larga distancia.

Al 18’ Erick Castillo se fue a línea de fondo y sacó un centro que fue capturado por el guardameta Barovero, que no dio rebote. Un minuto después, Brian Lozano hizo una finta en los linderos del área grande haciendo que Meza y Rodríguez se pasaran de largo, posteriormente el ‘Huevo’ disparó a la portería con un derechazo que dejó parado al portero y anidarse en el ángulo superior izquierdo al 19’15’’.

Diez minutos después del 1-0, Santos trató de ir por el milagro de la remontada con intentos de remate de Furch y Lozano, quienes no pudieron rematar la pelota con la cabeza ni con los tachones del chut. Tras los centros, Monterrey respondió con un tiro cruzado de Gallardo tras una asistencia de Hanssen.

En la última jugada del primer lapso, el zaguero central Matheus Dória conectó un cobro de tiro de esquina con la cabeza, pero su remate fue desviado por el arquero Barovero.

Empezando el segundo tiempo los Rayados apaciguaron los intentos santistas y en un balonazo largo, Jesús Gallardo se metió al área y cedió al holandés Hanssen, que se adelantó sobre el defensa Torres y con una barrida concretó el gol del empate al 56’55’’. Cuando los Rayados iban a festejar la anotación, el árbitro asistente Michel Morales levantó la bandera para invalidarlo.

Aunque antes de reanudar el encuentro, el silbante Luis Santander consultó con los encargados del VAR para cerciorarse si Hanssen estaba en posición adelantada. El veredicto final del videoarbitraje fue que el gol era legítimo, por lo que los regiomontanos celebraron la anotación que obligó a los Guerreros a marcar de nuevo tres goles.

Con ese tanto, los ánimos de los verdiblancos vinieron a menos y la situación se vio reflejada en los insípidos disparos a portería que no inquietaron al argentino Barovero, ya que los remates pasaron lejos del arco. Así avanzaron los minutos y Mohamed terminó el duelo con ocho futbolistas en defensa.

Situación opuesta de los santistas que sumaron hasta a los defensas al ataque. No obstante, en ninguno de los embates se le hizo daño a los neoleoneses. Con el paso de los minutos, el líder y máximo goleador de la campaña cada vez más falto de ideas y terminó por desesperar a su afición, que acabó abandonando el estadio cuando aún faltaban 10 minutos.

Sin opciones de remontada de los albiverdes, los aficionados entonaron el grito homofóbico ‘Eh P...’ en los despejes del arquero Barovero, hecho que obligó al árbitro a suspender durante dos minutos el partido. En la reanudación del cotejo, los gritos aumentaron y 120 segundos después, Luis Santander pitó el final del juego que decretó la eliminación del equipo líder Santos Laguna y el acceso a la ronda semifinal.

Al final del juego, los jugadores santistas le regalaron sus playeras a sus fanáticos, mientras que los regios celebraron con su porra. Cuando se iba al vestidor el estratega Mohamed, un grupo de aficionados lo insultaron y el timonel solamente les hizo señas y besó el escudo del Monterrey que traía en su traje.