Pumas de la UNAM ha querido borrar la cara que tuvo el torneo pasado y, por lo pronto, empieza con el objetivo al ganar su primer partido en casa ante los Tuzos del Pachuca por 2-1 en su casa en la jornada 1 del Clausura 2020.

Cuatro de lo seis elementos de refuerzo fueron utilizados para el encuentro. Johan Vázquez , Alejandro Mayorga, Favio Álvarez y Sebastián Saucedo eran las apuestas de 'Michel' para los primeros minutos del campeonato. Y los primeros minutos fueron bastante intensos para los locales. Pachuca también estrenaba técnico con Paulo Pessolano, que sigue causando dudas por su poca experiencia en primera división y es una apuesta extraña para los hidalguenses.

Los universitarios tenían la mejor presión pero muy poca efectividad en los pases. Pero la velocidad de Saucedo y el toque de Álvarez empezaron a ser constantes. Fue hasta el 25' que el mexico-americano recortó al 'Dedos' López y saco un disparo que se incrustó en la portería de Blanco. Fue entonces que lo Tuzos empezaron a ser totalmente dominados por los del Pedregal. El asedio y las oportunidades llegaron incluso antes del silbatazo de medio tiempo.

El partido era controlado y sin problemas para los locales. Pero el segundo tiempo fue un tema distinto. Primero porque había confianzas en la defensa auriazul que casi aprovechan los visitantes. Y la segunda fue que los capitalinos no lograban aumentar el marcador. Hasta que llegó una escena que siempre se quiere repetir en el Club Universidad.

Unos minutos después de debutar, al 70', Marco García, mediocampista de estatura baja pero con mucho talento en los pies, encontró un rebote en el área que prendió con todas sus fuerzas en el manchón penal que significó la segunda diana para Pumas y un fortalecimiento a la idea del trabajo en fuerzas básicas.

Pero parecía que todo se derrumbaba al 88' cuando Iniestra derribaba a Richards en el área y, en el último minuto de tiempo regular, Franco Jara descontaba con el tiro penal otorgado. Seis minutos de compensación y un conjunto universitario confundido hicieron ese tiempo casi insufribles. Fue hasta que el central dió el silbatazo final que la alegría ya se pudo palpar en Ciudad Universitaria.

Todavía quedan dudas en la afición universitaria sobre el futuro de este equipo rumbo a una posible calificación. Es la primera jornada y todo puede cambiar. Pero 'Michel' ha entendido que las victorias se dan una por una. Por lo pronto, solo queda festejar a un equipo que se arriesgó y logró una victoria por demás sufrida.