Luego de obtener uno de los peores inicios de torneo en la historia del club, Luis Fernando Tena fue cesado de su cargo como director técnico de Chivas. La inconformidad con la gestión del 'Flaco' ya era notoria por un grueso de la afición rojiblanca, por lo que la directiva terminó por cortar el proyecto.

Luego de sumar solo un punto de nueve posibles y sin haber anotado un solo gol, el técnico medallista de oro deja al Rebaño Sagrado en el penúltimo lugar de la tabla, pero ¿su despido se debe únicamente por estas tres jornadas? En VAVEL lo analizamos.

Luis Fernando Tena llegó al chiverío en septiembre de 2019 tras la salida de Tomás Boy. En su arribo a Verde Valle, se anunció que el contrato de Tena sería solamente por los partidos restantes del Apertura 2019 y su renovación estaría sujeta a resultados.

Su debut fue el menos esperado para el 'Flaco' y su cuerpo técnico, pues sufrieron una derrota aplastante por 4-1 ante América. Durante los dos partidos siguientes ante Pumas y Rayados, siguieron moviendo piezas hasta encontrar el once inicial con el que podrían trabajar. Fue hasta el encuentro de la Jornada 17 donde el equipo dirigido por Luis Fernando encontró su mejor forma en los pies de tres hombres clave: Alan Pulido, Javier López y Fernando Beltrán.

El cierre de torneo de Chivas fue esperanzador gracias a dicho tridente y el accionar del Guadalajara mejoró notoriamente. Tal situación orilló a la directiva ahora encabezada por Ricardo Peláez a darle continuidad al proyecto de Luis Fernando Tena. Sin embargo, las cosas perdieron su rumbo en muy poco tiempo.

Para el inicio del Clausura 2020, el Rebaño Sagrado tuvo una de las inversiones más fuertes de los últimos años para tratar de armar un plantel competitivo a Tena, pero del tridente que mejor había hecho ver el esquema de Luis Fernando salió quizá el hombre clave para ello: Alan Pulido. La salida del delantero tamaulipeco cambió por completo el accionar y terminó por complicar las cosas para el 'Flaco' y compañía.

A pesar de suplir la baja de Alan con José Juan Macías, las características de ambos nueves son distintas y el ataque rojiblanco sufrió mucho, sobre todo en apoyo. Aun así, Javier López y Fernando Beltrán seguían tratando de hacer a Chivas competitivo y eso se pudo notar en el arranque del 2020.

Con el pasar de las jornadas, la ausencia de Alan seguía pesando más y más y Luis Fernando se fue encontrando con más problemas y carencias en Guadalajara, como los problemas en zona baja y ser rebasados en posesión. Tena quiso solucionarlo sacando a López del once y "cerrando" el medio campo. Con ello comenzó a escribir su adiós.

El equipo sin dos de sus jugadores más diferenciales, uno por su salida de la plantilla y el otro relegado a la banca, se fue cayendo poco a poco a pedazos. La baja de juego de algunos jugadores (Sepúlveda, Beltrán, Brizuela, por mencionar algunos) también fue afectando el funcionamiento. Aun con todo ello, Chivas siguió sacando resultados, pero eran más por individualidades que por juego colectivo.

Tras regresar del parón por la pandemia, el equipo se notaba aún más perdido, sin un plan de trabajo de claro. La ausencias ahora por COVID-19 obligaron a seguir moviendo piezas; pero, en lugar de solucionar los problemas, estos siguieron creciendo hasta que finalmente el proceso fue insostenible y se terminó por cortar.

Luis Fernando Tena obtuvo 31 puntos de 57 que disputó al mando del chiverío, teniendo un porcentaje de efectividad del 54%. A pesar de ello, cabe resaltar que su salida no es por números, sino por lo poco o nada mostrado en cancha. Una de las plantillas más caras en la historia del Guadalajara no tenía una idea clara de juego.

Como dato histórico y anecdótico, Luis Fernando Tena dirigió tres torneos a Chivas (Apertura 2019, Clausura 2020, Guard1anes 2020) y ninguno lo completó.