Antes de iniciar el Guard1anes 2020, se hablaba de que Atlas era uno de los favoritos para hacerse con el campeonato de la Liga MX Femenil. Por lo tanto, es difícil hablar de que el segundo lugar obtenido por las Rojinegras haya sido un mérito con el que no se contaba, y tampoco puede decirse que fueron el equipo revelación del torneo (ese sitio le pertenece, sin lugar a dudas, al Querétaro). Sin embargo, si hablamos de un cuadro que se superó a sí mismo durante este semestre, es obligatorio voltear a ver al Atlas en esa discusión.

Para el Equipo del Paradero, el Guard1anes 2020 significó dejar atrás sus marcas personales, o continuar alargando las que ya tenía. Dirigidas por Fernando Samayoa, las llamadas Margaritas reafirmaron y perfeccionaron el estilo de juego que ya les conocíamos: agresivo, directo y vertiginoso, pero siempre manteniendo la solidez en la última línea. Este fútbol llamativo y ya poco común en cualquier categoría del fútbol mexicano llevó a la Academia a tener muy buenos números en todas las estadísticas existentes.

La travesía comenzó debutando a Mazatlán en el circuito, y el marcador no fue ninguna sorpresa: 4 – 1 a favor de las tapatías. Sin embargo, las dudas comenzaron en las dos jornadas siguientes, cuando una goleada en contra visitando a Cruz Azul y un empate con Gallos Blancos hicieron tambalear los buenos augurios de la temporada baja.

Ciertamente, la situación no era la óptima en CECAF, pero las jugadoras nunca dejaron que esos tropezones hicieran decaer la moral. De hecho, en palabras de su entrenador, las bofetadas fueron necesarias y llegaron en el momento justo para poder revertirlas. Desde su perspectiva, lo vivido en ese par de fines de semana “fue angustiante, fue difícil, pero lo trabajamos y salimos adelante”. Y vaya si salieron adelante.

Contando el empate con Querétaro, Atlas tuvo una racha de 11 partidos sin conocer la derrota, incluyendo seis triunfos de forma consecutiva entre las jornadas 8 y 13. En esa seguidilla de victorias, Samayoa y sus dirigidas tuvieron quizá la más dulce en la fecha 10, cuando, en calidad de visitantes y sin contar con Fabiola Ibarra (situación que se alargó por el resto del certamen), terminaron con el invicto de su archirrival, las Chivas Rayadas del Guadalajara, por marcador de 0 – 3. En la jornada 12, golearon 5 – 0 a las Bravas de Juárez, marcador que fue el más abultado a favor de la Furia en esta temporada regular.

El buen hilo conductor sufrió una sacudida en la fecha 14, cuando Tigres derrotó 3 – 0 a las Rojinegras en Nuevo León. No obstante, las de Jalisco volvieron a levantarse de un revés que pudo haber sido devastador en la recta final, y terminaron derrotando a sus siguientes tres adversarios, a pesar de que todos ellos estaban en puestos de Liguilla (Pumas, Pachuca y Monterrey).

Foto: Atlas FC Femenil
Foto: Atlas FC Femenil

Al final de la campaña, la marca de las de Colomos fue de 13 – 2 – 2, cifras que suman un total de 41 puntos y que las ubicaron en el segundo puesto de la tabla general. Lo anterior es especialmente relevante, pues significa el récord histórico para el club, que había tenido su mejor actuación en el Clausura 2019 con 34 unidades, es decir, siete menos que en la recién finalizada fase regular.

Pero, como ya se mencionó anteriormente, Atlas Femenil se cansó de superar sus propios récords, y la delantera fue la piedra angular de sus logros. Lo anterior se confirma al darnos cuenta de que la Academia finalizó las 17 jornadas del Guard1anes 2020 como la segunda mejor ofensiva de la Liga con 45 goles a favor, 10 más que su antigua marca, conseguida en el Apertura 2019.

En este punto, hay que retomar la ausencia de Fabiola Ibarra, quien se perdió la segunda mitad del semestre debido a una rotura de ligamento cruzado anterior y lesión de menisco sufridas durante un entrenamiento. El hecho de haber conseguido tal cantidad de puntos y anotaciones sin una mujer que es estandarte y uno de los mayores activos ofensivos del equipo, no hace sino engrandecer las conquistas de la Furia.

Por otra parte, el Equipo del Paradero se mantuvo invicto como local, jugando tanto en el Alfredo ‘Pistache’ Torres como en las instalaciones de CECAF. En estas dos plazas, las Margaritas tuvieron marca de siete victorias y dos empates, que, sumadas a los cuatro triunfos y el empate obtenidos en el pasado torneo Clausura antes de su suspensión, las convierte en las mejores locales del año 2020 con cosecha de 36 puntos.

Pero, para hablar de Atlas Femenil en el Guard1anes 2020, hay que hablar forzosamente de Alison González, atacante que llegó a apuntalar el poderío ofensivo jalisciense en el Clausura 2019. La artillera nayarita hizo sentir su impacto de manera inmediata en tierras tapatías, pero fue en este campeonato en el que despuntó marcando 17 dianas en 17 partidos, de los cuales 16 los arrancó desde el once titular.

Esta cifra no sólo convirtió a ‘Aligol’ en la mayor rompe redes de las Rojinegras en el torneo recién culminado, sino que le valió el subcampeonato de goleo individual. Con tan sólo 18 años, González llevó una carrera parejera en contra de Katty Martínez durante todo el certamen. Gracias a un hat-trick ante Rayadas en la última fecha, parecía que Alison podía igualar el hito conseguido por Ibarra en el Clausura 2019 al llevarse la distinción individual, pero la delantera de Tigres logró superarla por un tanto en el partido que le dio cierre a la fase regular. Aún así, 17 anotaciones es un gran número, que seguramente le dará a Alison González motivación para volver a pelear por ser la mejor artillera de la Liga en los próximos campeonatos.

Foto: Atlas FC Femenil
Foto: Atlas FC Femenil

Las caras conocidas fueron lo más destacado en el conjunto de Samayoa, pero también se hicieron cosas importantes otros rubros. Y es que, a lo largo del Guard1anes 2020, Atlas hizo debutar a tres futbolistas en la Liga MX Femenil (Stephany Anaya, Isabella Amyx y Alejandra Lomelí), además de haber promovido a tres canteranas al primer equipo (Kimberly Cuevas, Deyanira Villalobos y la ya mencionada Lomelí). Las académicas recién egresadas, así como la juventud ya existente en el plantel, hacen pensar que el futuro del cuadro rojinegro será uno de los mejores en el circuito.

Queda claro, entonces, que éste fue un torneo impresionante para el Atlas Femenil. Pase lo que pase en la Liguilla, Fernando Samayoa y su gran grupo de mujeres pueden sentirse orgullosos de lo que consiguieron en un semestre tan atípico, pero ahora tienen en la mira una nueva marca que buscarán romper antes de que termine el año: la barrera de los cuartos de final, que nunca ha sido superada por las Rojinegras. El rival será el sorprendente Querétaro, y, de superarlo, ¿por qué no pensar en el título de campeonas? Este equipo, por encima de cualquier otro, se ha ganado el derecho a soñar.