América y Tigres se encontraron en una final más, la tercera en los últimos tres años; ambos equipos han sido protagonistas en el balompié mexicano, por lo que se esperaban grandes expectativas para el partido de ida en el Coloso de Santa Úrsula.

Los de la Sultana del Norte, se prepararon mientras esperaban a los azulcrema en su travesía por Japón, jugando un par de partidos amistosos para no perder el buen ritmo con el que obtuvieron su pase a la final ante León.

El Azteca lucía abarrotado, americanistas se dieron cita en el estadio, mientras que los aficionados a los universitarios esperaban tomar ventaja y revertir la historia de la final del Clausura 2014.

El árbitro pitó el comienzo de 180 minutos y los pronósticos de unas Águilas cansadas, fueron cambiadas por una excelente actuación del equipo local en un primer tiempo donde tuvieron varias jugadas importantes para marcar el primer gol e irse adelante en el marcador.

Después de varias llegadas, en una jugada de Oribe Peralta, el árbitro del encuentro marcó un penal que le daba la oportunidad para llevar a su equipo al frente, sin embargo todo se quedó igual, el de Torreón fallaba la pena máxima, pero ahora, era el delantero de los Tigres, Gignac, quien intentaba y en una descolgada, le dio la ventaja a los felinos minutos antes de terminar el primero tiempo.

Ya en los segundos 45 minutos, los dirigidos por el 'Tuca' Ferreti, comenzaron a dominar el partido, pero Valdez, al 67', fue el encargado de devolverle los ánimos a su equipo y encender el Estadio Azteca.

Justo cuando estaba por finalizar el encuentro, los autores de ambos tantos, tuvieron un choque accidental, donde el francés sacó la peor parte y tuvo que salir de cambio para ser revisado.

Y justo como comenzó el partido, los equipos partieron,  con la serie totalmente abierta, para ahora pensar el juego de vuelta en el Volcán, estadio de Tigres, el próximo 25 de diciembre.