Los rojinegros del Atlas empezaron sumando en la Copa MX, no de a tres, pero a final de cuentas, fue muy bueno el punto que sacaron contra el Necaxa, ya que se encontraban abajo en el marcador. 

Tan sólo habían transcurrido 5 minutos de juego, cuando el equipo visitante tenía penal a favor, luego de una falta de Guillermo Martín. Los hidrocálidos no desaprovecharon la situación y abrieron el marcador por conducto de Isijara.  

Tal pareciera que al Atlas le hace bien que le metan goles, pues justo como sucedió el sábado ante el León en la Liga, que recibieron un gol y se vieron mejor en su funcionamiento (antes de recibir el segundo gol), los rojinegros se fueron al frente en busca del empate ante la poca afición que acudió al monumental Estadio Jalisco

Y premio al esfuerzo, los Zorros consiguieron su cometido al minuto 28, pues Martín Barragán se vistió de goleador y con remate de cabeza venció al cancerbero visitante.

A partir del gol del casaca 28, el partido se fue para abajo. Las llegadas cada vez eran menos, así como la intensidad con que se jugaba. Tal vez aquel remate de Lillingston que impactó el travesaño fue la única jugada de peligro posterior al empate atlista. 

Así cerró la primera parte e inició la segunda. Con la misma problemática del certamen anterior: la falta de dinamismo, de buen futbol. 

El partido se convirtió en una serie de experimentos por parte de ambos técnicos, pues tomaron el partido como una oportunidad para ensayar de cara a sus compromisos de Liga, en sus respectivas divisiones.

Luego de este empate, la racha de partidos sin ganar de Tomás Boy ,en su nueva etapa como DT rojinegro, sigue creciendo, al llegar ahora a tres partidos oficiales sin conocer la victoria.