Mala suerte, coincidencia o indisciplina, ya no se sabe qué es lo que pasa. El punto es que Diego Novaretti, central del León, volvió a ser suspendido en una jornada 1 y dejó afectado a su equipo, que cayó a manos del Atlas por goleada de 3-0. El argentino cometió un penal y recibió la roja, que para muchos era merecida y para otros no tanto.

Uno de los que quedaron con molestia fue, lógicamente, su entrenador Javier Torrente, quien no desaprovechó la oportunidad para calificar de injusta la expulsión que sufrió su jugador, argumentando que si hubiese sido en la mitad del campo, ni siquiera se vería algún cartón preventivo.

"Es una falta normal, que no debió ser ni expulsión. Si es en mitad de campo, no saca ni amarilla, pero se equivocó. Si hubiese tenido que corresponder la tarjeta, sería la amarilla. Ya demasiado castigo creo que es el penal como para que le agreguen una expulsión injusta", dijo el estratega.

Luego de lamentar que uno de los sustitutos, como Miguel Herrera Equihua, aún no está listo de su lesión y probablemente se pierda los dos próximos partidos, Torrente argumentó que Novaretti tiene mucha seguridad en sí mismo, por lo que confía en que situaciones como ésta no le afecten después de lo vivido.

"Diego es un jugador de experiencia, que tiene y está seguro de sí mismo, es centrado y esperemos apuntalar el momento del jugador y lograr que pase esta etapa complicada que viene sufriendo", concluyó.