Siempre llega este momento a principios de un nuevo año, aparece la ocasión en que los equipos con peor cociente pelean en el duelo definitivo para conocer sus destinos en el reinicio del año futbolístico; este semestre vamos a saber quién abandona la primera división de nuestro balompié y todo se va armando a partir de los famosos duelos de 6 puntos, por la resta del que pierde y la suma del que sale abante. Para ambos las pruebas ya comenzaron, habiendo respondido de distintas formas, pero este es uno de los momentos importantes, ya que por el lugar que ocupan, de un duelo se pueden modificar una serie de cosas.

Un duelo de presión, no puede ser diferente cuando se habla de buscar quedarse en el máximo circuito, más con el contexto que ha apañado el panorama de ambas instituciones desde el semestre pasado y un poco más atrás inclusive. Este duelo en especial puede servir para que comiencen los pronósticos, si los chiapanecos pueden sacar una ventaja que pareciera definitiva o los michoacanos logran meterse de nuevo en contienda y añorar la salvación.

Hacer una declaración

La temporada pasada no estuvo siquiera cerca de ser regular para Jaguares de Chiapas, no solo por el tormentoso torneo que los metió en los puestos más bajos de la porcentual, el asunto con el atraso de los pagos en los futbolistas se convirtió en una amenaza de descenso sin necesidad de arrancar el certamen decisivo. Hoy en día esa polémica no ha quedado del todo olvidada, pero mientras no se sepa a fondo lo que ocurre, es necesario hablar de lo que es evidente para este fin de semana.

Luego de “resolver” sus problemas financieros, la directiva hizo muchos movimientos en el mercado de fichajes, entre los que destacan nombres como Lucas Silva, Fraustino Arizala y Moises Muñoz, entre muchos otros. Pese a lo que se hubiese pensado, este torneo ha resultado fructífero para los chiapanecos, quienes se ubican sextos de la tabla con tres victorias y dos derrotas, suficiente para sacar una ventaja importante en la batalla por no abandonar el máximo circuito, en el lugar 15.

Después de haber obtenido el triunfo ante América a mitad de semana, no con mucho desgaste por no tener que viajar, la meta de los chiapanecos para el sábado será simple, conseguir la victoria que en el duelo directo les signifique un colchón importante para el resto de la competencia, que hundiría aún más a su oponente, dejándolo cerca de una condena que sería remontada de una forma casi heroica.

Buscar la proeza

En la previa pasada comentamos que no dejar escapar puntos era algo vital en esta situación, especialmente en casa y que una de las pruebas importantes era la fecha pasada. Pues bien, Monarcas ha fallado no solo en ese reto ante uno de los grandes, sino que en general ha hecho todo lo opuesto a lo que ocupa para salvarse. Actualmente se encuentra en lo más cercano a una novela; técnicos van y vienen, comienzos ilusionantes que acaban en realidades dolorosas, fichajes que no terminan de cuajar o bajan su nivel, todo esto no de un año, sino de unos cuantos atrás.

Todo ha llegado a tal grado que hoy el riesgo pareciera una realidad que para muchos ya no tiene regreso. Esto quedó refutado con el proceso de Pablo Marini que no llegó ni a la mitad del torneo; una mala planeación directiva en una institución que ha cometido error tras error. Aclarando que la en nuestro balompié todo es posible, como un épico retorno que salve a los morelianos o que tal vez equipos como Puebla o Cruz Azul puedan llegar al grado de ser la solución, mas hablando de la actualidad, no hay cómo pronosticar otra salida a los ‘Rojiamarillos’, pues no han estado a la par ni en resultados ni en puntos a sus más cercanos rivales.

Es evidente lo que debe hacer ‘El equipo de la Fuerza’, algo que no hace desde la jornada uno: Ganar. En caso de no conseguir la victoria y peor aún, pensando en un resultado adverso que les haga restar aún más sus posibilidades de alcanzar al resto, harían que la permanencia michoacana pareciera terminar, un letargo, una condena que sellaría su destino, convirtiéndolos en el candidato principal para ir al Ascenso MX al final del semestre. En caso de ganar la cosa seguiría siendo compleja, pero por lo menos ya un respiro puede ayudarlos a ver todo más claro.

Jugadores a seguir:

Jonathan Fabbro: De los pocos jugadores que han estado todos los minutos hasta ahora, el actual portador del dorsal 10, un hombre que es capaz de darle fluidez a la ofensiva y medio campo, con un par de anotaciones que muestran su capacidad de hacerse presente en el tanteador cuando el momento lo requiere, así como lo fue en el juego del martes. Buena parte de lo que ocurra un partido, en donde los puntos valdrían oro, pasa por los pies del argentino.

Jefferson Cuero: Es difícil adivinar el planteamiento de Roberto Hernández, mucho menos el resultado del cotejo que va a tener como interino y desde luego saber si se va a arriesgar metiendo a Cuero, en caso de no estar listo para ver actividad, pero ante la poca profundidad que ha mostrado ‘La Monarquía’, Cuero se muestra como una de las opciones, por su velocidad y facilidad de encarar, aunadas a la madurez que mostró el torneo anterior, así que su estancia en la cancha puede ser crucial para ayudar a dar más dinámica y contagiar ambas bandas con su ritmo.

Últimas alineaciones (jornada 5)